ESTADOS UNIDOS.- Michael Ireland casi quedó sin ojo por el zapatazo que recibió de la bailarina Sakeena Shager. Aunque el accidente fue sin querer, igual el sociate terminó con un taco aguja incrustado en el ojal.
Todo ocurrió en el club de chiquillas sin ropita, "Cheetah", ubicado en West Palm Beach, Estados Unidos.
Según las indagaciones, Shager habría agarrado mucho ritmo con el baile y tiró sus escasas pilchas a la chuña. Los clientes estaban felices, pero los gritos y la sangre del herido cortaron la inspiración de todos.
El abogado del damnificado, Lake Lytal, ventiló que la compañía de seguros aceptó pagar una indemnización por el incidente, que asciende a 650 mil dólares (unos 350 milloncejos chilenos), pero Michael Ireland todavía no responde si aceptará el trato o pedirá más, más.
Según consta en la denuncia, el pobre califa tiene visión doble desde que el taco aguja aterrizó en su retina. Además siente mareos, ¡Uy!