El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero vivió un bochorno en plena conferencia de prensa junto al guaripola ruso Dimitri Medvedev.
El petazeta se puso ante el micrófono para dar sus impresiones sobre un estupendo acordeón de turismo entre los ibéricos y sus amigos de la tierra del vodka. Y llegó la tragedia.
"Hemos hecho un acuerdo que sirve para estimular, para favorecer, para follar... para apoyar ese turismo", dijo el hombre fuerte de España.
El pobrecito apenas pronunció la palabra follar no supo dónde meterse, se vio muy incómodo pero al final terminó dignamente su alocución. Total, Medvedev nunca cachó el lapsus linguae.