Millaray Viera y Gonzalo Yáñez presentan su Amor Fugitivo: “Lo hacemos más por placer, una suerte de gusto”

Millaray Viera y Gonzalo Yáñez mantienen una amistad que data desde hace años, es más, se consideran familia.

Y el pasado 29 de noviembre, lanzaron “Amor Fugitivo”, el primero de cinco sencillos de un EP que fueron creando a base del amor que sienten por la música y el humor que comparten. Una grabación de dos figuras que después de juntarse a guitarrear en sus casas, finalmente deciden compartir ese lugar de intimidad con el mundo.

Un cálido estreno -disponible en todas las plataformas digitales- que con tono tragicómico relata la historia de dos personas que mantienen un romance secreto y comienzan a aburrirse de vivir en la clandestinidad.

Conversamos con el dúo mientras se dirigían a otra entrevista, Millaray manejando y Gonzalo como su copiloto, ambos se complementaban en las respuestas, demostrando sin querer su eterna complicidad.

“Hay pocos proyectos como el nuestro en cuanto al formato. Una pareja que canta canciones románticas, un poco más clásicas, invocando las canciones más tradicionales o con un tinte más bolerístico, bien pop también”, reconocieron a La Cuarta.

Chicos, hablemos de su primer sencillo “Amor fugitivo”, ¿cuál es la inspiración de la letra de la canción?

Gonzalo (G): Tenemos muchas instancias de conversación con mi amiga Milla, somos de juntarnos mucho, tenemos un sentido del humor bastante agudo, y esta canción tiene que ver con cosas que hablamos y nos dan risa. La letra habla de una relación medio clandestina, en las sombras, y nos parecía chistoso abordar ese tema, tenía cierto dramatismo, pero también medio cómica.

Millaray (M): Más lúdica, muy distinta a las otras canciones que todavía no lanzamos, que son de un amor o desamor más tradicional. Obviamente es una historia de ficción, que por lo mismo nos permitió jugar mucho. Gonzalo siempre dice que se imagina un romance de oficina, aunque él nunca en su vida ha estado en una oficina (ríe). Yo me imagino algo nada que ver, cada uno le da su interpretación, de eso se trata la música.

G: Pero lo bonito fue que salió, como todas las otras, de una manera muy fluida y sin pensar tanto. Este es un proyecto que no tiene tanto “craneo”, sino más bien es un dejarse llevar por la música, está formado desde un lugar muy genuino y auténtico. Eso para nosotros es re tranquilizador.

Eso mismo les iba a preguntar, ¿cómo se le ocurre la idea de hacer un dúo?

G: Con Milla estábamos pensando en cómo poder hacernos millonarios rápidamente. (ambos ríen). No, todo lo contrario, desde que somos amigos, hace muchos años de eso, siempre he creído que Millaray es una persona muy talentosa, en el amplio aspecto de lo que esa palabra significa. Tiene mucho carisma, en su voz, en su carácter, en su manera de traspasar la pantalla, y eso a mí me parecía algo que yo tenía que alentar. Naturalmente me salía decirle “¿Cómo no vas a darte el gusto de sacar tu propia música?”. Y me pareció que estaba bueno que fuera conmigo. Ahora, sucedió también porque empezamos a subir algunos videos de versiones de nosotros, de canciones de otra gente.

M: Se llegaron a viralizar algunos de esos videos y nos dimos cuenta de que podía funcionar. Eso quizás fue la inyección de confianza que hacía falta para tomar la decisión. Pero sin pretensiones, sin muchas expectativas, más que pasarlo bien entre nosotros, disfrutar el proceso, que no fuera algo impuesto o tener que responderle a nadie, ir a nuestro ritmo, poder gozarlo, y así fue.

G: Todo el proceso es medio de juego, incluso hacer entrevistas para nosotros es divertido. La Milla no es una amiga, es familia para mí, eso lo hace mucho más llevadero. Y lo que dice Milla de no tener presión, también es importante. Porque tenemos nuestras carreras, y lo hacemos más por placer, como una suerte de gusto que nos estamos dando, y eso creo que se nota también.

M: Por la música y la vida.

G: ¡Salud!

Sincronía musical

¿Cuáles han sido las influencias para el proyecto?

G: Tenemos varios. Millaray, por un lado, es una suerte de gran librería musical, tenemos gustos muy compartidos, como los Beatles, Bowie, Costello, Abba.

M: Demasiados gustos compartidos, y una visión de la música bastante parecida, un amor por la canción, sin ningún prejuicio respecto a los artistas.

G: Tenemos un ranking de las mejores canciones del universo. (Ríen).

M: Y en algunas coincidimos…

G: Hay una idea en común, después hay matices, pero tenemos una idea en común de lo que es una gran canción, de las cosas que nos gustan. De hecho esta canción era distinta, fue Milla la que sugirió que fuera un poco más Jeanette. Yo quería que fuera más reggaetón, me parecía divertido, sobre todo porque yo nunca he hecho un reggaetón en mi carrera, y sin embargo ahí Milla me paró, todo bien con el reggaetón, nos gusta. Pero no, quizás no..

M: No nos identifica, la canción ya era muy lúdica.

¿Me quedó la duda respecto a lo que dijeron de su ranking de mejores canciones del universo, cuál es la número uno?

G: Habíamos compartido la idea de que “My Way”, es una canción que la vas escuchando y parece que hubiera caído del cielo, como que está conectado con...

M: Algo muy divino, con la belleza, como con algo que existió siempre, no sé, como una canción que nadie la hizo…

Gonzalo: Que es parte del universo.

“La relación que tenemos con Milla es súper creativa”

¿Cómo son sus procesos creativos?

G: Creo que el proceso creativo tiene que ver con el ejercicio de estar permanentemente estimulando. Aunque no estemos componiendo una canción, siempre estamos jugando con la música, cambiando letras, traduciendo. Hemos hecho algunas traducciones que les han ido bien, de “Something Stupid” de Frank Sinatra con Nancy Sinatra, por ejemplo, fue la primera que se viralizó. Hacemos todo a dos voces, eso también es súper estimulante para la mente.

M: Y es otra forma de experimentar en lo creativo, porque intentamos muchas veces que incluso esas armonías no sean las obvias.

G: Exactamente, también lo creativo está muy asociado al tipo de relación que uno tenga. La relación que tenemos con Milla es súper creativa, es de conversar de temas profundos, de agudizar el humor. Es también la forma que encontramos, de relacionarnos, la música nos ocurre en las situaciones más inesperadas, ahí fluye.

¿Por qué decidieron hacer un EP y no un disco?

G: Hacer un disco, son 12 canciones, para mí significa un desgaste muy grande.

M: Es un riesgo también para un artista nuevo.

G: Quizás el EP de alguna manera cerraba por lo menos esta etapa.

M: En estos tiempos hacer un EP es una gran cosa. En tiempos de singles, que no necesariamente tienen una conexión. Hay artistas que sí hacen EP, pero hay otros que ni siquiera eso. Y para nosotros era importante marcar una época, un hilo conductor entre esas canciones, un concepto.

Gonzalo: Sentimos que hay un concepto súper clarito en estas canciones que hemos grabado. Y como dice Milla, cierran esta primera etapa, no sabemos si vamos a seguir haciéndolo. Y esto lo digo humildemente, hay pocos proyectos como el nuestro en cuanto al formato. Una pareja que canta canciones románticas un poco más clásicas, invocando las canciones más tradicionales o con un tinte más bolerístico. Bien pop también, pero al mismo tiempo con un encanto que busca conectar con la belleza, con el amor, con la amistad.

Pese a que ustedes suben videos en redes y Gonzalo tiene una tremenda carrera, Milla, ¿tú sentías que tenías una deuda pendiente con la música?

M: No sé si lo definiría como una deuda, sí es algo que siento que tenía un tanto reprimido en mí. Pero no es que pensara mucho en eso, en un momento de mi vida era el camino que yo quería tomar, yo tenía un contrato discográfico incluso cuando era chica, y finalmente decidí...

G: Arrugó.

M: No, no. Lo que pasó es que tenía muchas y dudas creativas, y sentí que era mejor tomarme un tiempo. Tenía que terminar el colegio, era una niña. Después entré a estudiar música en la universidad, pero tenía muchas inseguridades, y el hecho de haber estado siempre tan rodeada de músicos. Mi familia son todos músicos, desde mi abuelo en adelante, mis padres, mis hermanos, mis tíos, mi ex marido, mis amigos, todos, y todos hombres más encima. Entonces, de alguna forma, quizás, inconscientemente yo me relegué a un segundo plano o no creía en mí, me costó mucho decidirme hacerlo, era un tema también. Y llegó un punto en que yo dije “mejor no lo hago”, decidí tomar otro rumbo y bloquear esta parte mía que seguía existiendo en la interna, en mi casa se seguía escuchando, haciendo, tocando música siempre, pero no de una para afuera. Fue con Gonzalo, esto de juntarnos a cantar mucho, lo que…

G: Yo soy el único hombre en su vida que la alentó y la hizo creer en sí misma. (Ambos ríen).

M: Esa es la cuña. (Ríe).

Gonzalo: “Yo soy el único hombre en su vida que la alentó”. No, pero sí creo que fui, en ese sentido, un gran arengador porque yo creo mucho en ella. Entonces me daba mucha lata y encontraba que se estaba desperdiciando ahí una cosa bonita que hacer.

“Estamos experimentando”

Si bien, me han comentado que el proyecto se dio de forma orgánica y sin muchas pretensiones, ¿han pensado en presentaciones?

M: Sí, y bueno, nos ha pasado que ya nos han llamado preguntándonos si podemos hacer fechas y cosas. Nos empezó a pasar antes de lanzar el EP y nosotros desistimos, no quisimos hacerlo porque queríamos lanzar nuestra música primero, que la gente la conociera.

G: Milla es súper matea en ese sentido y yo soy mucho más hippie, Milla tiene una frase que a mí me queda siempre: “yo privilegio el plan de vuelo”. De repente puede aparecer un productor y decir: “los quiero tener, sí o sí”, y hablar de mucha plata por decir algo, y eso no es algo que a Milla la motive en primera instancia. Obviamente todos necesitamos vivir, pero Milla privilegia el plan de vuelo.

M: Pensar en una cosa a largo plazo, lo que puede ser pan para hoy puede ser hambre para mañana. Es una forma de ver las cosas que he tenido como siempre.

G: Igual tenemos músicos que tocan nuestras canciones. Están listos y además estamos listos nosotros, porque para nosotros salir a cantar en ese sentido es parte de lo que hacemos todo el tiempo. No es un estrés, sino un disfrute, y todo a su tiempo.

¿Y se viene el video de este primer sencillo?

M: Es algo que en un momento era sí o sí, y no sé si va a ser para este o para el próximo. Lo estamos viendo. Material audiovisual sí, pero los videos ya no tienen el efecto que solían tener. A veces hay que optimizar más el tiempo y los recursos en material audiovisual que le llegue más a la gente.

G: También nos hemos pasado el rollo de que a la gente lo que más les gusta de nosotros es nuestro lado orgánico, en la casa, ojalá lo más despeinado posible. Entonces a veces pensamos que vamos a hacer un videoclip como una superproducción, saliendo todos así emperifollados.

M: Que también puede pasar…

G: Pero todo lo que significa hacer un videoclip, no en términos económicos, sino en un montón de cuestiones. ¿Será esto lo que la gente quiere de este proyecto? El lado natural yo encuentro que es súper valioso y que si podemos llevarlo por ese lado también, me parece súper encantador. Pero como dice Milla, no es algo que tengamos definido.

M: Estamos experimentando, esa es la respuesta a tu pregunta. A la gran introducción de Gonzalo y su poca capacidad de síntesis (ríe). Estamos experimentando y vamos a ver el camino.

G: Está buena esa, yo hablo largo y Milla maneja.

M: Es que yo tengo mentalidad televisiva, me autoedito.

G: (comienza a cantar) “Ella es mucho más normal que yo”.