A diferencia de uno, que con suerte tenía teléfono fijo en la casa cuando chico, los broquitas de hoy parece que nacieran con el celu en la mano. Y hartas rabias hacen pasar a los papis pa' que los suelten y pongan atención en otra cosa.
Gerardo Chandía, profe de la Escuela de Psicología de la U. Católica del Maule, nos tira unas recomendaciones útiles para llevar la cosa por el camino correcto.
Ponga atención: