Entre las características más llamativas de su apariencia, se encuentran su gran tamaño y su color amarillo. Se presume que llegó al país en un contenedor.
No es una casualidad. Distintas investigaciones han concluido que ciertos puntos favorecen a que algunos sean más atractivos para estos bichos.
El insecto, que es nativo de Norteamérica, está desde hace algunos años en el país, aunque su presencia se vuelve más notoria cuando las temperaturas aumentan.
A diferencia de los humanos, no tienen la capacidad de masticar y deben recurrir a un particular proceso para descomponer la comida. Acá, un video lo muestra.
El estudio fue publicado el lunes en la revista Current Biology, tras un año y medio de observación en el país africano Gabón. Después de décadas, “todavía nos sorprenden con nuevos comportamientos inesperados”, declaró una de las científicas.
