Desde el inicio de la pandemia la compañía había establecido una prohibición temporal para impedir que los alojamientos de casas diesen pie a este tipo de eventos.
A raíz de la pandemia de coronavirus, y con el objetivo de que se cumpliesen las medidas de distanciamiento social para hacer frente al COVID-19, la compañía Airbnb estableció en 2020 una prohibición temporal sobre el arriendo de casas para fiestas y eventos masivos.
Ahora, más de dos años después del inicio de la pandemia, la plataforma de alojamientos modificará sus reglas para hacer de la prohibición algo permanente.
“Con el tiempo, la prohibición de las fiestas se convirtió en mucho más que una medida de salud pública. Se convirtió en una política comunitaria fundamental para apoyar a nuestros anfitriones y sus vecinos”, explicó la compañía a través de un comunicado.
A grandes rasgos, los usuarios no podrán concretar alojamientos para llevar a cabo “fiestas o eventos disruptivos”, siendo estos últimos entendidos como cualquier reunión que atraiga las quejas de los vecinos. Asimismo, se pondrá énfasis en la prohibición de reuniones con invitaciones abiertas a través de redes sociales y tampoco se permitirá que los anfitriones promocionen sus hogares de arriendo como “casas de fiestas”.
Airbnb informó que ha suspendido las cuentas de más de 6 mil usuarios que violaron la prohibición de fiestas desde que esta medida fue establecida.