A diferencia de lo que ocurre con muchas otras, para ellas la edad no fue (es) un impedimento sino una oportunidad. Al cruzar la barrera de los cuarenta, incluso cincuenta años, fueron capaces de algo que suena sencillo pero no lo es tanto: redescubrir su amor propio y seguridad, apenas una pequeña porción de lo que ofrecen al resto. Fantasía prohibida de los más jóvenes, ellas son las experimentadas. Las llaman maduras, veteranas o milfs y forman parte de un eslabón esencial para la industria. Aquí, tres de ellas cuentan todo.
MarciaGoo
—Es fácil criticarnos, pero no saben todo el proceso que tenemos detrás para llegar a algo —dice Marcia González (50), con un tono que denota decepción y enfado a partes iguales—. La gente de repente no entiende que éste es otro trabajo más.
Ella comenzó a entenderlo hace unos cuatro años. Recién divorciada y con una hija adolescente a su cuidado, buscó reinventarse con una carrera en redes sociales. Quizás así podría cumplir su sueño de llegar algún día a la pantalla chica. Mientras tanto, terminó sus estudios de contabilidad y deprisa se entregó al nerviosismo y ansiedad que suponen los procesos de selección de personal. Pero después de cierto tiempo, cansada de repartir su currículum y entrevistarse para nada, se convenció de que a sus cuarenta y tantos no tenía espacio en el rubro, había que pasar página.
Entonces —plena pandemia, ya sin demasiadas opciones— González se percató de algo: “Vi que había que cubrir una necesidad, la de entretener a los hombres que estaban encerrados”. En un principio echó mano —lentamente— a su Instagram, captando seguidores por interno, y luego se atrevió a abrir una cuenta en Onlyfans, pero la plataforma a la larga no satisfizo sus expectativas. De ahí su llegada a Arsmate, su actual domicilio. “Le di un giro a mi vida de 180º y comencé a crear contenido para adultos, a ganar plata y a darme todo lo que me merezco”, saca pecho.
Denominada La milf de Chile —milf, a propósito, es el acrónimo de Mother I’d like to fuck, es decir, alude a mujeres maduras y atractivas sexualmente deseadas— González, con un contenido fundamentalmente explícito, ya se coronó Mejor Creadora Milf 2022-2023 de la plataforma y fue portada de la revista Holyvice el pasado junio.
—¿Cómo te sientes con eso?
—Me hace sentir no sólo hermosa y deseada, sino también empoderada. Ser hermosa o atractiva es cien por ciento actitud, la edad es sólo un número y tener cincuenta años se siente lo mismo que a los veinte en todo orden de cosas.
—¿Por qué, entonces, crees que la gente se suele poner trabas con la edad?
—La gente no se pone trabas por la edad porque quiere, sino porque la sociedad machista nos encasilla, nos etiqueta por culpa de una normativa rancia y arcaica.
Entre cuatro y ocho millones de pesos se embolsa mensualmente Marcia González en Arsmate. El monto final, dice ella, dependerá “de cómo uno se mueva también”. Tal vez eso sea lo mejor de su trabajo. Pero después está todo lo demás: en más de una ocasión algún suscriptor la contactó para ofrecerle dinero extra por tener encuentros sexuales. “Me han ofrecido dos palos, hasta tres palos”, pero les ha contestado que no, “porque no soy escort”. También ha tenido que lidiar con “psicópatas”, “gente que te amenaza” y “haters”. “Pero ya no me afecta, porque es parte del proceso”, advierte. “Tengo más que claro que esa gente sólo tiene valor detrás de un celular, de frente nunca nadie me ha insultado”.
—¿Qué le puedes decir a esa gente?
—Uno ha vivido una vida de sacrificios, ha pasado por cosas malas. Yo he sufrido violencia intrafamiliar, he sufrido tantas cosas... Yo estudié, tengo mi profesión. Si no me dedico a mi profesión no es porque yo no quiera, es porque la sociedad no me deja, ¿cachái?, porque si tenís cuarenta y tantos, cincuenta años, no te dan trabajo. Entonces no llegamos sólo a hacer contenido, puta, porque se nos ocurrió, no. Es porque vemos que también es otra oportunidad de ganar plata.
Susy Shine
Poco después de cumplir seis años, a Susana Barrientos la inscribieron en una escuela de ballet, y a partir de ese instante, flechada por la danza, hizo match con toda clase de artes escénicas. El recorrido, sin embargo, la condujo a una carrera como periodista que le permitió inclusive hacer clases en una universidad y que recién dejó formalmente en 2018, cuando renunció a sus trabajos en comunicaciones, cautivada por otra pasión mucho más afín al punto de partida: el poledance. El poledance, dice ella, era lo que en realidad necesitaba, una especie de complemento capaz de maridar “deporte, danza y una conexión especial con la sensualidad” y lo que, en definitiva, la acercó a la creación de contenido erótico.
Interesada especialmente en la expresión corporal, montó primero su propio estudio en Valparaíso y en pandemia, en tanto impartía clases online, se estrenó en las plataformas:
—Me permitió explorar y expresar esta parte de mi personalidad de una manera creativa y artística —afirma—, conectando con mis suscriptores desde un enfoque lúdico y estético. Sentí que podía ofrecer algo auténtico y diferente en este ámbito.
En contexto, relató en el blog de Arsmate —actualmente, su única plataforma de contenido—, sacarse fotos eróticas le servía tanto en lo personal como en su vida amorosa, algo que también advirtió su esposo, quien de hecho la incentivó a sacar provecho económico de ese material. “El hecho de ser creadora de fantasías eróticas, prepararme para grabar, ponerme lencería bonita, ha ‘encendido’ nuestra relación”, explica Barrientos, “pasando de la monotonía a la fantasía en estos doce años de matrimonio”.
Con 41 años, tres dedicados a la creación de contenido erótico, @susyoficial.cl (su nombre en Arsmate) ya fue premiada como mejor creadora en la categoría Milf (2024), participó en un videoclip del trapero PoRroFiNo y en el piloto del programa de TV Hablemos de ti. Y al margen de las propuestas de la plataforma, destina buena parte de su tiempo en otros proyectos personales enfocados en el bienestar de mujeres mayores de 40 años. Por ejemplo, es la creadora de Sedúcete, evento que ya va por su sexta versión y que “incluye talleres de Sensual Dance y coaching terapéutico sobre sensualidad y amor propio”, y es desarrolladora de un programa de entrenamiento online para mujeres de esa edad, “diseñado para mejorar la fuerza y flexibilidad, con un enfoque en el bienestar físico y hormonal”.
—Mi propósito es ayudar a las mujeres a reconectar con su esencia y a sentirse más seguras en todas las etapas de su vida.
—¿Crees que hay prejuicios en torno a la edad en plataformas de contenido erótico?
—Creo que existen prejuicios en torno al tema del contenido erótico, y a las mujeres que nos dedicamos a esto. Y si bien hace poco las mujeres de 40 o 50 años eran consideradas “viejas”, ahora eso ya es cada vez menos. Sí creo que la creación de contenido erótico es aún un tema muy cuestionado, sobre todo si eres mamá o estás casada, y creo que pasa por un tema más moralista. Yo me divierto mucho y siempre he creído que debemos ser libres de elegir lo que nos plazca hacer.
—¿Qué les dices a tus “alumnas”?
—Sé que el crear este tipo de contenido no es para todas. Siempre les digo que tienen que pasarlo bien ante todo, disfrutar, eso fue lo que realmente me impulsó —además del tema dinero— pero también con esto quiero mostrarles que “tú puedes ser lo que quieras ser”, como dijo Barbie, jajajá.
Rocketbela
A Isabella Muñoz (45) la convencieron su madre, su hermana y su esposo:
—Estábamos en un asado familiar, en la casa de la playa, y ahí me dijeron: “Oye, tú tienes hartos atributos físicos…, grandes” —cuenta, y ríe tímidamente—. “Podrías probar, tienes bonito cuerpo”. Y yo ahí dije: “¿Y quién va a querer?”.
Rocketbela, nickname que emplea en redes sociales y en Arsmate, cuenta que siempre tuvo cierto interés por tomarse fotografías o lucir “un poquito más sexy” en Instagram, sin embargo, su inicio en la plataforma para adultos fue algo recatado, sin prisas. “Lo vi como ‘si algo cae, cae’”, y claro, para entonces se desempeñaba como ejecutiva de cobranzas, no era su mayor fuente de ingresos. Pero, de la noche a la mañana, lo inesperado: luego de ocho años, y en medio de la pandemia, la despidieron. De inmediato, su actividad en Arsmate tomó otra dimensión. Ella misma lo explica: “Cuando me quedé sin trabajo y no se podía salir, ahí lo vi como una real fuente de trabajo”.
Comprometida al cien por ciento, las cosas cambiaron: debió contarle a su hijo (22), acaso su mayor desafío. “No quería que él se enterara por algún amigo que le mandara alguna foto mía, algún video, le dijera: mira, tu mamá”, confiesa Muñoz. Su padre tampoco lo tomó bien. Él era el único de su círculo cercano que desconocía esta nueva faceta y lo descubrió viendo un reportaje en el noticiero de TVN. “Era la primera entrevista que me hicieron para las noticias”, cuenta Rocketbela, “y no estaba muy contento, pero nada que hacer, ya soy grande, se había conversado acá en la casa, entonces él no podía opinar mucho”.
Dueña de casa, familiera ante todo, a Isabella Muñoz lo que más le acomoda de trabajar en plataformas de contenido erótico es precisamente el tiempo del que dispone para cumplir con sus quehaceres sin precipitaciones. En sus palabras, “soy prácticamente mi propia jefa”.
—La verdad es que yo hago mis cosas, como una mujer normal, pero después, cuando tengo que actualizar mi plataforma, cuando veo que he subido todo lo que tengo, me hago unas fotitos bonitas. Tengo mis disfraces por ahí, mis babydolls, cosas bonitas, y me voy haciendo el tiempo para subir videos a redes sociales, especialmente a TikTok, para que la gente me conozca y me siga.
—En una entrevista con el blog de Arsmate aseguraste que “estoy en mi mejor momento”. ¿Sientes que las limitaciones por la edad están cambiando?
—Efectivamente, siento que estoy en mi mejor momento. La gente se ponía muchas trabas, pero ya no tanto encuentro, y aparte que la gente está envejeciendo diferente a como envejecíamos hace veinte o treinta años atrás. Alguien de cuarenta años, hace veinte años o treinta años atrás, era una persona muy vieja y ahora tú ves a personas de cuarenta o cincuenta años haciendo lo mismo que alguien de veinticinco o de treinta. Pasándolo bien, haciendo lo que quieren. Entonces, es súper diferente cómo envejecían antes las personas.
—¿Podríamos decir que los 40 o 50 son los nuevos 20?
—No sé si los nuevos veinte, pero como siempre he dicho: siento que estoy en mi mejor momento y mejor que en los veinte, porque en los veinte yo pensaba puras cabezas de pescado, po jajajá. Y ahora siento que estoy mucho más madura mentalmente también, mi cuerpo me acompaña para hacer este tipo de cosas y todo lo que yo quiero en realidad.
—Tú, que eres de las más veteranas de la plataforma, ¿cómo te proyectas en Arsmate? ¿Tienes algún otro objetivo?
—Seguir ojalá en esto. Crecer, hacerme más conocida y ojalá llegar a los millones a los que mis compañeras llegan, jajajá. Y me gustaría, más adelante, hacer alguna colaboración con alguna amiga, algo más tranqui.