La compañía automotriz reducirá fuertemente su nivel de producción en Japón y Norteamerica, en un escenario en donde siguen los problemas con los semiconductores.
La pandemia de COVID-19 no solo ha provocado que más automóviles anden en circulación, ya que las personas prefieren esa alternativa al transporte público. También ha provocado que menos autos nuevos estén disponibles en el mercado, elevando el valor de los vehículos usados.
Pero además de la demanda, otro factor que ha influido directamente en esas situaciones involucra a los problemas de distribución de semiconductores. Eso es por ejemplo lo que le sucedió a la reconocida compañía automotriz Toyota.
La compañía de automóviles más grande de Japón ahora anunció que reducirá su producción en un 40% en septiembre.
En The Wall Street Journal agregan que los problemas para Toyota afectarán a la mayoría de sus plantas en Japón. Lo mismo sucederá con su línea de automóviles más vendidos. En Norteamérica, las plantas reducirán su producción entre un 40% y un 60% durante este mes.
Todo lo anterior provocará que hasta 90 mil vehículos menos sean ensamblados en Japón. En Norteamérica, la cifra podría alcanzar los 80 mil autos.
Consideren que los problemas con los semiconductores tienen múltiples variables. Por un lado, la industria automotriz subestimó a la demanda que habría en medio de la pandemia. Por otro lado, las nuevas olas de COVID-19 han afectado fuertemente al sudeste asiático, que es donde se ubican las principales fábricas de semiconductores que se utilizan para la creación de múltiples productos.
Este es solo un ejemplo de un problema de alcance mundial que ha afectado a múltiples sectores. Por ejemplo, los problemas para acceder a las nuevas consolas Playstation y Xbox tiene directa relación con la baja producción de chips que se generó en el marco de la pandemia.