Los recipientes con agua son el ambiente propicio para que el mosquito Aedes Aegypti deje sus huevos y estos sobrevivan.
En los últimos meses, países vecinos como Argentina, Perú y Brasil han enfrentado un aumento explosivo de contagios de dengue.
Cabe recordar que el dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes Aegypti. Puede causar fuertes dolores de cabeza, fiebre, dolores musculares y vómitos. En casos más graves, la afección provoca dificultades para respirar e insuficiencia circulatoria.
Si bien Chile se encuentra sin casos, a mediados del año pasado el Ministerio de Salud levantó una Alerta Sanitaria en el país para prevenir “la presencia o riesgo de introducción y dispersión del mosquito”. La medida está vigente hasta el próximo 31 de marzo.
Cómo distinguir al mosquito que transmite dengue
Para que sea sencillo el reconocimiento de la especie Aedes Aegypti, es necesario saber que algunas de las características más evidentes son su tamaño pequeño, que generalmente fluctúa entre 5 a 10 mm, su cuerpo es de color negro y con diminutas manchas blancas que aparecen hasta en sus patas.
“Es muy fácil de identificar y si queremos ir un poquito más al detalle, el mosquito lo que hace es que cuando se para sobre su presa levanta las patas de atrás”, dijo el entomólogo Alfredo Ugarte a BioBioChile.
De acuerdo a la Fundación iO, organización dedicada a estudiar enfermedades infecciosas en el mundo, un hábito de esta especie es que piquen al atardecer y al amanecer. Es en esos momentos del día cuando las hembras suelen salir para “buscar hospedadores”, pero si es que estos aparecieran en las zonas donde están sus crías, la picadura puede ocurrir a cualquier hora.
Además de ser vector del dengue, Aedes Aegypti podría transmitir otras enfermedades como la fiebre amarilla, chikungunya y zika, que tampoco están presentes en el Chile continental hoy en día.
Dónde habita el mosquito que transmite dengue
Aedes Aegypti se cría en recipientes con agua de zonas oscuras. Esto se debe a que, en ese contexto, las bajas temperaturas del agua son propicias para el desarrollo de los huevos, larvas y pupas.
“Los tazones, las tazas, las fuentes, las llantas, los barriles, los floreros e incluso una tapa pequeña, mientras contenga agua, se transforma en un ‘criadero” perfecto’”, expresan desde el Ministerio de Salud.
En la adultez el mosquito puede habitar tanto dentro como fuera de viviendas. Luego de alimentarse, las hembras comienzan a buscar estructuras con agua para dejar sus huevos.
“Cuando las personas tienen acceso a las redes normales de agua potable no se producen acopios de agua, pero cuando se producen asentamientos irregulares, la gente acumula agua en distintos tipos de depósito que se constituyen como criadero de mosquitos”, expresó la ministra de Salud, Ximena Aguilera.