Aunque trabaja en un colegio de San Clemente, en la región del Maule, Eduardo Varela lleva 11 años administrando la página de Facebook "Tiempo y clima en tu región", donde lo siguen más de 160 mil personas, a las que suma otras 60 mil en X. Se trata de un autodenominado "meteoaficionado", que aunque cambió la carrera de meteorología por pedagogía, es consultado por la gente como una suerte de oráculo cada vez que se vienen lluvias y temporales de todo tipo.
No es climatólogo. De hecho, su rama está bastante lejos de aquello porque estudió la carrera y la tuvo que abandonar. Aunque se dedica a la pedagogía, Eduardo Varela (35) jamás se alejó de lo que define como una de sus principales pasiones: es administrador de la página de Facebook “Tiempo y clima en tu región”, donde cuenta con 161 mil seguidores, además de otros 61 mil en X. Ha tenido aciertos, pero también conflictos. A sus 35 años se mueve como una suerte de celebridad entre sus pares.
“El gusto por la meteorología comienza desde que soy pequeño. Cuando chico leía mucho sobre el tiempo. Luego fui creciendo y cuando llegué a la universidad la primera opción de carrera para estudiar fue Meteorología. Ingresé en el año 2007, en la Universidad de Valparaíso, pero, por diferentes razones, no la terminé”, cuenta. Entre las razones, explica, estaba que la universidad pasaba en constantes paros. Por eso alcanzó a terminar un año como alumno.
Varela pasó su infancia en Quilpué y luego de cursar meteorología, se cambió a la Católica de Valparaíso a pedagogía en Castellano. Un cambio radical, que lo llevó a hacer clases de Lenguaje en la Escuela Peumo Negro, de San Clemente, comuna del sector precordillerano de la Región del Maule, a 15 minutos de Talca, donde actualmente vive.
Cuando habla de sus libros favoritos, Varela tiene una tendencia a la fantasía y ciencia ficción. Y enumera entres sus favoritos: Cien Años de Soledad, de Gabriel García Márquez; Cuentos de amor, locura y muerte, de Horacio Quiroga; El Señor de los anillos, de J.R.R Tolkien; Canción de hielo y fuego, de George R. R. Martin; y Narraciones extraordinarias, de Edgar Allan Poe.
Complementario a su trabajo, intenta ayudar a la comunidad con sus predicciones del clima. “Cuando estaba estudiando para ser profesor, empecé con la página. Se da porque unos compañeros me decían que yo siempre les daba el pronóstico del tiempo y acertaba. Me dijeron, ‘oye, ¿por qué no creai una página en Facebook?’. Y en ese tiempo Facebook era revolucionario. En el 2013 comencé”, relata.
Creando una comunidad
Los seguidores fueron en aumento y llegó un momento clave: la catástrofe en el Norte Chico, en el otoño de 2015. A través de su página, Varela había advertido lo que podía suceder debido al flujo fluvial: “A principios de marzo yo empecé a anunciar que venía un evento de lluvia importante. Fue el aluvión que ocurrió en Atacama y en Coquimbo el 24 y 25 de marzo del 2015. Ese pronóstico lo había hecho con una semana y media de anticipación, pero, al ser de un aficionado, no se tomó en cuenta″.
Su mecanismo se basa en estar constantemente actualizado. Algo que le demanda una parte importante de su tiempo: “Diariamente estoy revisando los distintos modelos que me entregan los sistemas, ya sea el europeo que es el ECMWF o el norteamericano que me proporciona la NOAA. A través del sistema voy revisando las imágenes y como tengo conocimientos básicos de meteorología puedo hacer interpretaciones”.
Sobre este punto, el docente agrega que está decepcionado por la respuesta tardía ante las emergencias que se dan cada año: “No tenemos un gran mecanismo de prevención. Esperamos que las cosas pasen y tomamos ahí recién las medidas. Eso no me gusta, entonces trato de avisar con anticipación, para que las personas, sobre todo las de regiones, del campo, sectores rurales, se preparen. Por ejemplo, el año pasado en el Maule fueron muchos los afectados por esto, pero yo sé que hubo gente que sabía del tema y se preparó”.
Varela dice que no ha pensado en hablar directamente con las autoridades, pero no es algo que descarte: “Si me quieren contactar, yo estoy abierto para conversar. Trabajo en una escuela que depende del municipio. Lo que no me gustaría, eso sí, es que trataran de colocar en mi boca palabras que no he dicho, con la intención de querer criticarme más que pedirme comentarios o ayudas”.
Como un trabajo
Para Varela se trata de algo importante. Más allá de que no sea su labor principal, sabe que hay personas que esperan sus publicaciones. “Después que tengo un primer pronóstico, tomo las imágenes interactivas de aplicaciones y ahí empiezo a escribir en el computador o en el celular, empiezo a hacer el análisis. Eso lo hago unas cuatro o cinco veces al día. Y en la noche, después de llegar del trabajo, me pongo a redactar. En el caso de que haya alguna emergencia, le dedico más tiempo y a veces puedo estar escribiendo en la madrugada y publicando durante la mañana”, dice.
“Para tratar de compatibilizar, antes de irme al trabajo reviso los modelos. Si veo que hay una anomalía que compartir, me doy el trabajo media hora, publico mientras estoy tomando desayuno o mientras voy camino al trabajo. Después lo otro lo hago a mediodía, si es que tengo algún espacio. Generalmente esto lo hago en la noche y los fines de semana”, complementa.
Según dice, la idea de seguir entregando pronósticos es poder acercar la meteorología a la gente, sin la necesidad de usar tecnicismos. “Soy profesor, con esto estoy enseñándole a las personas a ser más precavidas. Hay muchas personas que a lo mejor no ven la televisión porque generalmente se habla de asesinatos, delincuencia y es poco el rato que le dan al tiempo”, da a conocer.
Pese a que no tiene el título, la gente llega en masa a su página de Facebook y a su cuenta de X (@EdoWeatherman). Y si bien los comentarios son mayormente positivos, también hay usuarios que lo critican. “Son personas que defienden a los profesionales... Dicen que cualquiera puede tomar el celular, ver una aplicación y hacer un pronóstico. También apuntan a que yo utilizo la aplicación Windy, pero lo hago porque tiene mucho material para mostrar, como mapas e imágenes. Es más interactivo. Con el tiempo los mismos expertos que dan el pronóstico en la televisión empezaron a ocupar Windy porque es didáctica”, relata.
“La mayoría de las personas son bastante agradecidas. De hecho, en mi lugar de trabajo también ya se corrió la voz. Me preguntan con anticipación, ‘profesor, ¿cuándo va a llover?’. Algunos cuando van planifican sus viajes y también me consultan. ‘Profesor, ¿se puede ir a la cordillera?’, cosas así. Ha sido bastante positivo con la comunidad en general”, agrega.
Por otro lado, asegura que valora el trabajo de los meteorólogos y que su intención no es menoscabar su labor. “En su momento, una persona que estudiaba, que ahora es meteoróloga, me criticó, pero yo le expliqué que no estoy robándole y que no estoy lucrando. Utilizo mi red y si la gente me sigue es porque informo bien. En la televisión hay varios meteorólogos con los que yo compartí estudios. Ninguno de ellos me ha criticando. En TVN hay dos excompañeros y nunca me han dicho algo negativo. Yo no quiero pelear con los profesionales, al contrario, los respeto. He tenido que defenderlos, porque hay gente que los critica, siendo que la meteorología es una ciencia inexacta”, dice.
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