Esta es la planta de la fortuna que no puede faltar en tu hogar, según el Feng Shui

Zamioculca - Foto Verde Pimienta
Zamioculca - Foto Verde Pimienta

Esta planta es perfecta para decorar tu casa, pero además es de bajo mantenimiento.

El Feng Shui es una práctica que implica organizar el espacio vital para crear un equilibrio con el mundo natural. Su base es aprovechar la energía en el hogar a través de cálculos científicos para establecer la armonía entre los habitantes y su entorno.

Según este milenario arte chino, hay una planta que es perfecta para atraer buena suerte y prosperidad a las casas. Lo mejor de todo es que es muy fácil de cuidar.

Conocida por sus beneficios energéticos, esta planta no solo es una excelente opción decorativa, sino también una aliada para mantener la energía positiva en tu entorno.

¿Cuál es esta planta afortunada? Te contamos todo lo que necesitas saber para incorporarla en tu hogar y aprovechar sus beneficios.

planta departamento zamioculcas zamiifolia

La zamioculca, comúnmente conocida como la planta de la fortuna, es una especie originaria de Tanzania que destaca por su capacidad de adaptarse a interiores con poca luz.

Según el Feng Shui, la zamioculca atrae prosperidad y equilibra las energías de los ambientes, absorbiendo las negativas y potenciando las positivas.

Según esta práctica el lugar ideal para aprovechar los beneficios de esta planta, es en entradas, salas o comedores.

¿Cuidados esenciales de la zamioculca?

Si bien es una planta de cuidado fácil, hay que tener algunas precauciones:

  • Riego: La planta tolera bien la sequía por lo que durante los meses cálidos, se puede regar unas tres veces por semana, pero en invierno, una vez a la semana es suficiente.
  • Iluminación: Aunque se adapta a poca luz, prefiere estar en lugares con luz indirecta brillante.
  • Fertilizante: Puedes utilizar abono NPK 10x10x10 para mantener su crecimiento saludable.
  • Drenaje: Asegúrate de que la maceta tenga un buen drenaje para evitar el exceso de agua.
  • Hojas amarillas: Puede ser por exceso o falta de agua, raíces apiñadas o deficiencia de nutrientes.
  • Plagas: Ácaros y cochinillas pueden atacar la planta.

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