Una de ellas es Chichén Itzá, en México, que alguna vez fue importante centro político y cultural de la civilización maya.
Son muchos los países que cuentan con verdaderos tesoros naturales y arquitectónicos que son capaces de deslumbrar a cualquiera que los vea. Sin embargo, apenas un puñado de esos lugares han llegado a ser considerados como los más destacados de la era moderna: hablamos de las siete maravillas del mundo.
En 2007, la compañía New Open World Corporation (NOWC) encabezó una iniciativa inédita para ese momento: que gente de todo el planeta escogiera los destinos más emblemáticos del mundo. Uno de los criterios del concurso era que solo se admitían sitios levantados por el hombre hasta el año 2000.
Gracias a esa encuesta global donde llegaron a participar 100 millones de personas, se elaboró una lista de 7 destinos que también han sido reconocidos por la Unesco. De ellos, tres están en países de Latinoamérica.
Cuáles son las 3 maravillas del mundo que están en Latinoamérica
1. Chichén Itzá, península de Yucatán, México.
Se trata de uno de los principales sitios arqueológicos de los mayas y tuvo su época de esplendor entre los siglos IX y X. La emblemática ciudad en ruinas alguna vez fue un importante centro cultural y político de esa civilización.
El que probablemente sea su monumento más icónico es el Templo de Kukulcán, también conocido como El Castillo, que fue levantado por los mayas itzaes en el siglo XII. Tiene una forma de pirámide, una altura de 24 metros y cuatro niveles.
Todos los años, Chichén Itzá reúne a millones de visitantes que llegan interesados por su monumental arquitectura e importancia histórica. Desde 1988 que también es considerado Patrimonio de la Humanidad.
2. Machu Picchu, en Perú.
Este antiguo asentamiento en alturas, que se ubica a más de 2.300 metros sobre el nivel del mar, fue construido por los incas en el siglo XV y es considerado uno de los sitios de mayor importancia de ese imperio. En el pasado fue un lugar sagrado donde se le rendía honor a dioses como el sol y la luna.
Su nombre significa “montaña vieja” en quechua y se ha convertido en uno de los destinos imperdibles para los viajeros que están interesados en obras que combinan arquitectura y naturaleza. Esto, ya que la construcción está rodeada por todos lados de hermosa vegetación.
En 1983, Machu Picchu entró a la lista de Patrimonio de la Humanidad.
3. Estatua del Cristo Redentor, Río de Janeiro, Brasil.
Se trata de una icónica estatua de estilo art deco que se sitúa en un punto privilegiado de Río de Janeiro: la cima del monte Corcovado. Eso le otorga una vista panorámica de toda la ciudad. Luego de que su construcción se extendiera por cinco años, fue inaugurado en 1931.
La obra representa a Jesús de Nazaret con los brazos completamente abiertos, como si diera la bienvenida a quienes visitan la ciudad brasileña. Su altura alcanza los 30 metros y también tiene un pedestal de ocho metros.
El Cristo Redentor no solo destaca por ser un punto turístico por su belleza y la vista única que da hacia Río de Janeiro, sino que también por ser un símbolo del cristianismo en Brasil.
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