En Japón se ha vuelto común la terapia donde llorar no solo es permitido, sino incentivado, con el objetivo de romper los tabúes emocionales y transformar el llanto en una experiencia liberadora.
En un mundo donde muchas veces se reprime la expresión emocional, Japón ha encontrado una forma inusual de abordar uno de los sentimientos más humanos: el llanto.
Conocida como “Rui-Katsu” (que se traduce como “buscar lágrimas”), esta terapia emocional busca romper los tabúes alrededor del llanto.
Rui-Katsu se ha convertido en una práctica terapéutica que desafía las normas sociales tradicionales del país, ofreciendo un espacio donde el llanto no es solo permitido, sino incentivado.
En los últimos años, ha ganado popularidad, invitando a las personas a reunirse con extraños y liberar sus emociones a través del llanto colectivo.
Hidefumi Yoshida, uno de los instructores del método, ayuda a la gente a liberarse de los estigmas culturales que restringen a las personas y los incentiva a dejarse llevar por las emociones.
Esta práctica consiste en sesiones en las que los participantes ven películas, escuchan música o leen historias que los hagan llorar, ya sea de tristeza o alegría, ya que la explicación detrás de este método es que llorar tiene efectos terapéuticos.
Esta tendencia, que ha crecido rápidamente, se basa en la idea de que compartir el acto de llorar puede ser una poderosa herramienta para la sanación emocional, ya que al llorar se liberan hormonas que alivian el estrés.
Según señala BBC, Rui-Katsu también sería una buena forma de reducir las tensiones, despejar la mente e incluso aliviar el dolor.
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