Inspirado en los calcetines japoneses del siglo XV, la firma Maison Margiela puso de moda una prenda tan incomprendida por algunos como amada por otros. Hoy es furor en redes sociales y cada año se reinventa.
Hay muchas prendas que han pasado a la historia al transformarse en icónicas: el bolso Birkin de Hermès, al esmoquin de Yves Saint Laurent, o el traje de tweed de Chanel. Una de esas piezas es el zapato Tabi, que genera tanto amor como rechazo por su particular forma de pezuña o pata de camello.
Se trata de una de las máximas tendencias en redes sociales y el street style de las grandes ciudades de la moda. Este tipo de calzado que tanto a enamorado a los Millennials y Centennials fanáticos del estilo.
Están inspirados en una prenda del siglo XV, los calcetines tabi de Japón, confeccionados con el dedo gordo separado de los demás para así poder ser usados con las sandalias tradicionales.
Fue esa la idea que tomó el controvertido diseñador Martin Margiela, y lo transformó en un objeto de culto. La primera colección de los botines Tabi se presentó en 1989 y desde entonces es un imprescindible en cada colección de Maison Margiela.
Un calzado que no es para todos
Desde la marca, afirman que “cada una de las piezas capta el espíritu vanguardista e inconformista de la maison y constituye un clásico del patrimonio que reaparece en cada colección”.
Estos botines tienen diseño de puntera dividida y tacón cómodo, y se abrieron camino entre los “zapatos raros” durante los años 90, informa la revista Glamour.
Pero la popularidad de los Tabi ha crecido gracias a todas esas versiones que han sacado: desde zapatillas, mocasines, bailarinas y hasta sandalias; además de su viralización en redes como Instagram y TikTok.
También es uno de los diseños favoritos de los artistas. Rosalía, Bad Bunny, Cardi B, Dua Lipa, y hasta Manuel Mijares. Pocos se resisten a probar al menos una vez este tipo de calzado jugado y divertido.