Los violentos crímenes de Ítalo Nolli, el delincuente que atentó contra policías y fue el más buscado de Chile

Los violentos crímenes de Ítalo Nolli, el delincuente que atentó contra policías y fue el más buscado de Chile. Foto: Ítalo Nolli.
Los violentos crímenes de Ítalo Nolli, el delincuente que atentó contra policías y fue el más buscado de Chile. Foto: Ítalo Nolli.

Tras asesinar a dos agentes de la PDI, inició una fuga que finalizó con su propia muerte. Entre sus pertenencias, tenía una extensa cantidad de armamento.

Fue el 23 de marzo de 2011, en la comuna de San Bernardo, cuando se desató una de las persecuciones más peligrosas en la historia del crimen en el país.

Esa mañana, una patrulla de la Policía de Investigaciones (PDI) se acercó a fiscalizar dos vehículos que se encontraban estacionados en la calle La Divisa, en las proximidades de Lo Espejo.

Eran una camioneta y un camión. Al interior de la primera estaba un hombre de 69 años, Ítalo Jorge Nolli Olivan, sentado junto a Mercedes Vallade, su pareja.

Por otro lado, en el segundo vehículo, estaban un trabajador de él y su hijo: Raúl y Ulises Campos.

Cuando los detectives efectuaron la fiscalización correspondiente, se percataron de que Nolli tenía una orden de detención vigente.

Sin embargo, antes de que pudieran arrestarlo, él sacó un arma de fuego y comenzó a disparar contra los agentes policiales.

Tras apretar el gatillo en múltiples repeticiones, las heridas de bala desataron la muerte del subcomisario Marcelo Morales y la inspectora Karim Gallardo.

Asimismo, los funcionarios Miguel Meléndez y Esteban Tapia resultaron heridos, aunque pudieron alejarse de la mira del tirador.

Después de concretar el atentado, los dos vehículos se fueron con sus pasajeros en diferentes direcciones.

En ese momento, se desató un intenso operativo que convertiría a Nolli en el criminal más buscado de Chile.

Ese mismo 23 de marzo de 2011, fue acribillado en el centro de Santiago, en la Región Metropolitana.

Evidencia Ítalo Nolli
Los violentos crímenes de Ítalo Nolli, el delincuente que atentó contra policías y fue el más buscado de Chile. Foto: PDI.

Los crímenes y el fin de Ítalo Nolli

Nolli y sus acompañantes se encontraban en la zona a raíz de negocios ilícitos que dirigía. Específicamente, en el ámbito del cobre robado.

Después de escapar con Vallade de la escena del crimen, fueron hacia su departamento ubicado en Cumming, en donde tomaron una serie de elementos para continuar con su fuga.

Entre estos últimos, también se encontraban armas.

Tras pasar por su residencia, Nolli se fue en solitario equipado con pistolas. Tenía claro que era buscado y no escondía sus intenciones de volver a abrir fuego.

Cuando iba en su camioneta en las cercanías de San Pablo con Cumming, se encontró con más policías frente a los que también apretó el gatillo: los agentes James Manríquez y Gerardo Vera terminaron gravemente heridos.

Luego, en Cienfuegos con Agustinas, hirió a los policías Juan Cortés y Sergio Nicloux.

Eso sí, a diferencia de en sus encuentros previos con las autoridades, esta vez él también fue alcanzado por las balas de los otros funcionarios.

Ítalo Nolli murió en dicho lugar.

Y cuando las autoridades revisaron su domicilio, se encontraron con una trampa hechiza que él mismo había diseñado para eventualmente dañar a los efectivos.

Se trataba, a grandes rasgos, de una escopeta posicionada para disparar cuando se abriese la puerta.

Según explicaron posteriormente desde la PDI, si la puerta hubiese sido forzada podría haber desatado un grave incidente.

Al interior del departamento, también hallaron una gran variedad de munición y armamento, incluso, de guerra.

Más adelante, se fueron conociendo detalles sobre su pasado.

Por su parte, Mercedes Vallade, Raúl, y Ulises Campos fueron llevados a juicio por múltiples delitos, tales como encubrimiento de los dos homicidios consumados y los dos homicidios frustrados (por lo que ocurrió en San Bernardo esa mañana).

Según rescató BioBio a 13 años de aquel violento episodio, aunque fueron declarados culpables, los tres quedaron con libertad vigilada y sus penas se dieron por cumplidas.

Evidencia Ítalo Nolli
Los violentos crímenes de Ítalo Nolli, el delincuente que atentó contra policías y fue el más buscado de Chile. Foto: PDI.

El pasado de quien fue el criminal más buscado de Chile

Ítalo Jorge fue el primer hijo de la relación entre Hilda Olivan Catalán e Ítalo Nolli Melloni.

Al nacer, el 27 de mayo de 1942 en Santiago, no respiraba y había sido dado por muerto. No obstante, se hicieron maniobras para que pudiera vivir.

Tras dichas acciones, los doctores determinaron que el pequeño había quedado con daño neuronal.

Durante su infancia, su madre se preocupó permanentemente de cuidarlo, mientras que su padre, italiano de nacimiento y empresario alimenticio, lo trató constantemente con dureza y frialdad, según se detalla en declaraciones de familiares rescatadas por La Tercera en 2011.

Dos años después de su llegada al mundo nació su hermana Mariana, quien se convirtió en el centro de atención del padre.

Este último había llegado a Chile desde Piamonte, en el norte de Italia, después de que su propio progenitor se negara a la idea de que pudiese entrar al Ejército del dictador Benito Mussolini.

Corría 1933 cuando llegó a la casa de un tío abuelo que tenía un local de cecinas en el centro de la capital.

Con el tiempo, se ganó su confianza en el negocio y entabló una relación con Hilda Olivan, la cual derivó en que contrajeran matrimonio.

Pero no pasó mucho tiempo para que, tras la boda, demostrara actitudes agresivas constantes con los integrantes de su familia.

Según los relatos a los que tuvo acceso LT, el temor hacia el padre era tan grande que los niños se escondían cuando lo escuchaban llegar por las tardes.

De la misma manera, mantenía malos tratos con su cónyuge.

Un familiar de los Nolli Olivan relató lo siguiente al citado medio: “Cuando comían, nadie podía hablar, estaba prohibido. Ni su esposa ni menos sus hijos, que años más tarde sumó una niña más. El hijo varón estaba en una situación más complicada que las demás, porque la indiferencia y los castigos lo maltrataban a diario”.

Así, Ítalo Nolli hijo fue adoptando una visión cada vez más oscura de su padre, mientras que también fue gestando una particular atracción hacia las armas.

Durante sus últimos años de estudio en el Instituto Hispanoamericano, en donde tenía un buen rendimiento académico, dejó de creer en Dios y en la Iglesia y empezó a levantar pesas. Tenía el objetivo de entrar a la Escuela Militar.

Esto último nunca se concretó. Se dice que padre se lo habría prohibido, sin darle argumentos de por qué no podría alistarse en la institución.

Un día, en el local de cecinas, Nolli padre tuvo una discusión con su hija que llevó a que una tercera —que no era parte de la familia— la agrediera.

Frente a esa situación, él no la ayudó, por lo que ella llamó a la casa familiar para comentar lo que había pasado.

Nolli hijo le contestó y, tras escucharla, fue hacia el negocio y se tiró encima de su padre para golpearlo en repetidas ocasiones.

Ahí lo amenazó y le dijo que si agredía a su madre o a su hermana, él mismo se encargaría de atentar contra él.

A inicios de la década del 60 continuó con sus ejercicios con pesas y trabajó en la confección de artefactos de cuero para conseguir ganancias monetarias.

Ítalo Nolli
Los violentos crímenes de Ítalo Nolli, el delincuente que atentó contra policías y fue el más buscado de Chile. Foto: ítalo Nolli.

Lo primero llevó a que fuese apodado como “Mister Músculo” y a que no pasara desapercibido cuando se iba de vacaciones a las playas de la Quinta Región.

En una de esas escapadas recreacionales, conoció a una joven llamada Katrina Jadué, con quien entabló un vínculo romántico.

Un amigo de su familia que los conoció como pareja aseguró que ella “era la mujer más linda de la zona (...) todos los hombres la admiraban por su belleza y su físico, pero llegó Ítalo, que tenía una pintaza”.

“Katrina lo vio y la atracción fue inmediata”, agregó.

Se casaron rápidamente en 1963, pero una vez que lo hicieron, Nolli dejó de mostrarse como el hombre que ella había conocido.

Más bien, fue todo lo contrario. Según rescató LT, la hermana de ella, Magaly relató que la agredía, no la dejaba salir y que incluso llegó a perder un hijo.

“Su vida con él fue un infierno”, recalcó.

Por otro lado, familiares de Nolli afirmaron en dicho reportaje que no hubo golpes, pero sí una relación tóxica.

Estuvieron juntos por aproximadamente dos años antes de que terminara su relación.

Para ese entonces, Nolli empezó a pasar gran parte de su tiempo en Plaza Egaña, en donde se acercó a través de conocidos al alcohol, las drogas y las armas.

Una de las decisiones más determinantes que tomó por esos años fue irse a Estados Unidos bajo la expectativa de ganar más dinero. Ahí, fue recibido en Filadelfia por una familia que conocía.

Un familiar dijo al citado medio que los amigos de Nolli con residencia en dicho país escribieron una carta diciendo que él se había ido a combatir en Vietnam.

Años más tarde, desde la Interpol negaron que aquello fuese cierto por una vía legal.

Tras volver a Chile se casó con María Gloria Farías, tuvo tres hijos y se le ocurrió cobrar dos seguros de vida a nombre de su esposa, declarándola muerta. Se trataba de un fraude, ya que la mujer no había fallecido.

Por aquel delito fue llevado a prisión en 1987 y, en la revisión de sus pertenencias, se descubrió que contaba con una extensa cantidad de armamento.

Durante el tiempo que estuvo en reclusión era visitado por su madre. Y posteriormente, tras salir del centro penitenciario al que fue asignado, inició sus actividades ilícitas en el ámbito del cobre robado.

Su padre murió en 2004 a causa de un problema pulmonar, mientras que su progenitora falleció en 2010.

Tres años después de que Ítalo Nolli atentara contra los agentes de la PDI y fuera acribillado ese 23 de marzo de 2011, su hijo, Aníbal Nolli aseguró en una entrevista con Qué Pasa que su papá “tenía un trastorno bipolar que nadie trató, ni siquiera cuando estuvo preso”.

“No sé cómo dejaron libre a alguien que era un peligro para la sociedad. Él es el mejor ejemplo de un sistema nefasto, porque de la cárcel salió peor”, enfatizó en dicha conversación.

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