La mujer de 35 años tomó la decisión de vender contenido en la plataforma para adultos para así complementar sus ingresos, y abrió el complejo debate.
Kristin MacDonald, una mamá soltera que trabaja como asistente educacional en la secundaria Terry Fox en Port Coquitlam, Canadá, está haciendo noticia luego de que que la junta escolar le pidió cerrar todas su redes sociales, incluida su cuenta en OnlyFans.
La mujer de 35 años decidió vender contenido erótico en la plataforma para adultos para complementar su sueldo de medio tiempo. Y varios apoderados consideraron inapropiado el pituto.
Si la asistente no cerraba las cuentas, se arriesgaba a perder su puesto ayudando a estudiantes con necesidades especiales. “Me entristece porque amo el trabajo que hago para ayudar a los estudiantes”, dijo.
La cadena CBC News se contactó con algunos abogados, quienes dijeron que esta disputa laboral es complicada porque el trabajo de MacDonald como creadora de contenido erótico tiene un estigma social.
La mujer es exentrenadora personal y contó que sabía que era un riesgo abrir una cuenta en OnlyFans, por lo que mantuvo el secreto el mayor tiempo que pudo, usó un seudónimo y bloqueó al personal de la escuela de todas sus redes sociales.
MacDonald necesitaba aumentar su sueldo porque es mamá soltera, debe mantener una familia y además, tiene una hija pequeña que fue sometida a una cirugía de columna.
“Hay una especie de desesperación cuando ganas menos de 50 mil dólares al año en uno de los lugares más caros de Canadá, si no del mundo”, dijo. “No gano un salario digno siendo asistente de educación”.
Por otro lado, la mujer aseguró que no vende pornografía y que tiene sus límites. Sus publicaciones en redes son con lencería o bikini, y con eso atraía a posibles clientes.
Un caso de discriminación
Y si bien, en un principio se sintió mal por las quejas, luego vio la situación como un acto de discriminación. Por este motivo hizo pública su historia en CBC News, quienes intentaron contactarse con el colegio pero no quisieron hablar.
El abogado defensor penal Guillaume Garih dijo que a los educadores se les pide que “mantengan la integridad, la credibilidad y la reputación de la profesión. Los educadores son modelos a seguir. Los educadores están sujetos a un estándar más alto y son responsables de su conducta dentro y fuera del servicio”.
Sin embargo, Kristin no es profesora, es asistente, por lo que no entraría dentro de este protocolo. Por otro lado, el mencionado medio conversó con Angela Jones, profesora de sociología en Farmingdale State College en Nueva York.
Ella dijo que: “Las sociedades y culturas de todo el mundo continúan intentando controlar los cuerpos de las mujeres”, y que si la despiden: “la escuela no está protegiendo a sus estudiantes; están enviando un terrible mensaje paternalista, que no todos los trabajadores tienen derecho a la dignidad”.
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