El país europeo desde hace un tiempo que cambió su nombre y confundió a varios en el mundo entero. Revisa los motivos de su nueva denominación.
Cambia, todo cambia. A pesar que desde chiquititos las personas crecieron conociendo un país llamado Holanda, eso ya es parte del pasado.
Desde ahora, los lolosaurios poco a poco están acostumbrándose a decirle Países Bajos, tal como han informado y recalcado las autoridades locales.
Desde el año 2019, el cambio de nombre se hizo realidad luego de una intensa campaña que se realizó para que se eliminara el uso del nombre Holanda.
Incluso, el sitio oficial de turismo país del noroeste de Europa ya no se llama holland.com. Pero eso no fue el único cambio. La selección de fútbol también dejó atrás su antiguo nombre y pasó a llamarse derechamente Países Bajos, cuestión que todavía confunde a los fanáticos del peloteo.
Eso sí, el naranja siguió siendo su color oficial.
Cabe mencionar que Países Bajos es la traducción en español de Nederand, que viene del término en neerlandés “Neder-landen”, que significa “tierras bajas”.
De hecho, el país europeo se denomina de esa forma por la ubicación orográfica de su territorio, el cual se encuentra parcialmente debajo del nivel medio del mar, según consigna el sitio de la BBC.
Por su parte, agregan “Holanda” procede del nombre de la región del mismo nombre, la cual se encuentra en el oeste del país, y que se dividen en las provincias de Holanda del Norte y Holanda del Sur.
¿Por qué Países Bajos?
De esta forma, hay neerlandeses que son holandeses, pero los habitantes de alguna de las otras 10 provincias no son holandeses.
Además, en el siglo XIX surgió el reino de los Países Bajos, el que precisamente le dio nombre que tiene el país por estos días.
De hecho, en la actualidad la Real Academia Española reconoce este nombre oficial.
“El nombre Holanda designa estrictamente una región occidental de los Países Bajos, dividida en dos provincias, Holanda del Norte y Holanda del Sur”, indica la RAE.
Eso sí, tampoco apunta con el dedo a quienes lo siguen llamando de manera coloquial como “Holanda”, pues lo considera “frecuente y admisible”.
Sin embargo, recomienda no utilizarlo en textos oficiales.