La mega producción de Netflix retrata sabrosamente a la Corona británica desde la intimidad del Palacio de Buckingham.
Algo que caracteriza a “The Crown”, es que luego de verla, el espectador queda con la sensación de que nadie es tan malo -ni tan bueno- como creía.
Una suerte de lavado de imagen a través de la telenovelesca puesta en escena de Netflix, que retrata a la familia británica dentro y fuera de los protocolos reales.
Y donde Isabel -interpretada por Claire Foy, Oliva Colman e Imelda Staunton- se toma el protagonismo como la joven de 25 años que asumió la corona por siete décadas.
Un verdadero culebrón
Con interpretaciones despampanantes que logran humanizar a aquellos personajes que parecen tan lejanos: mostrando lo que piensan, sienten y viven.
Un contraste perfecto entre la siempre despiadada y caníbal prensa que ha cubierto los más grandes hitos de la realeza, y las siempre polémicas libertades creativas de la ficción.
“The Crown” se podría llevar fácilmente el premio como la serie que más ha influido en la percepción de la gente sobre la imagen de la familia real. Y es que más que un drama, parece un sabroso culebrón de las tres de la tarde para ver tomando té y comentar al día siguiente.
Una saga que se apoderó de 21 Emmys con ese perfecto casting de talentos que parecen reencarnaciones de los miembros de la monarquía, por su increíble parecido.
Una carta de amor a la reina
Y mientras la quinta temporada se estrenará el próximo noviembre, Peter Morgan, guionista de la serie, afirmó que las filmaciones de la sexta temporada se han pausado por respeto al fallecimiento de Isabel II.
“The Crown es una carta de amor a ella, y no tengo nada mas que añadir por ahora, solo silencio y respeto”, declaró luego del fallecimiento de la eterna reina.
Por su parte, el historiador inglés Greg Jenner, desenmascaró el secreto de la exitosa apuesta del streaming: “The Crown acentúa lo lejana e incógnita que es la monarquía , pero al retratar su vida como una telenovela hace que los espectadores crean que saben mas de ellos de lo que ralamente saben”, sentenció.
Y mientras el Palacio de Buckingham jamás le ha dado el visto bueno a la serie ni su respaldo a los hechos históricos, se cree que saben perfectamente que cada capítulo ayuda a mejorar la imagen que se había visto deteriorada por tanto tiempo.