El teléfono ultra portátil de la compañía cumple con todo lo requerido para considerarse un plegable competitivo: una gran pantalla exterior, durabilidad y rapidez, aunque su implementación de software a veces deja que desear.
Creo que el 2024 es el año en el que finalmente los teléfonos plegables dejaron de ser un experimento y se volvieron un artículo más dentro del extenso portafolio de teléfonos celulares. Y esto no es necesariamente porque se hayan vuelto particularmente populares o accesibles -siguen estando por sobre la barrera del millón de pesos- sino que por la gran cantidad de marcas que están lanzando equipos con pantallas que se doblan y especialmente en Chile.
Este año, a la oferta que cada año nos trae Samsung, se sumó Motorola con la serie razr 50 y ahora Xiaomi hizo lo mismo con el Xiaomi MIX Flip, el primero de su tipo que es lanzado en nuestro país y que es el teléfono que pudimos probar durante estas últimas semanas.
Como su nombre lo indica, se trata de un teléfono en formato Flip, es decir, se dobla de manera horizontal para quedar convertido en una especie de pequeño cuadrado el cual no solo luce bastante ondero, sino que además ayuda a transportarlo de mejor manera.
Abierto, es un dispositivo de 6,86 pulgadas y cerrado, posee una pantalla externa AMOLED de 4 pulgadas, la cual solo es interrumpida por los dos módulos de fotografía que posee. Esto es muy importante ya que se trata de una pantalla externa bastante funcional y grande, la cual no solo está para adornar y entregar información básica, sino que incluso se puede utilizar para controlar algunas aplicaciones.
La pantalla exterior posee un widget con el que puedes ir viendo los íconos de las aplicaciones disponibles en un carrusel y al costado, una adaptación de la misma, en formato vertical, como si se tratara de un mini celular.
Inicialmente es compatible con servicios bastante básicos como relojes, calendarios, el clima y más, pero también se pueden ir agregando más apps, sobre todo para reproducir contenido. Por ejemplo, Spotify, YouTube o TikTok. Esta última funciona muy bien, ya que al ser tan sencilla de operar, puedes ir pasando rápidamente de un video a otro. Además, cuando es requerido, es posible usar un teclado que se adapta muy bien a la pantalla, para, por ejemplo, hacer búsquedas dentro de las apps que estás usando o incluso chatear de manera veloz por WhatsApp.
Lo que no es tan elegante y donde veo principalmente los problemas es en el traspaso de una aplicación que estás viendo en modo completo con el celular abierto y su versión mini. Efectivamente hay continuidad entre lo que estás haciendo -es decir, si estás viendo algo en YouTube, puedes continuar con la pantalla exterior del MIX Flip, pero para ello primero debes cerrar el dispositivo, desbloquearlo y luego, elegir el ícono de la app que estabas viendo.
Considerando que el equipo posee el chip Snapdragon 8 Gen 3, es algo que podría haberse pensado o al menos implementado, pero no se hizo principalmente por software. De hecho, el software es el que siento yo, pone las principales trabas al equipo, ya que me encantaría que el paso de la pantalla grande a la chica, o de la chica a la grande fuera mucho más fluido.
Dos problemas más que tuve con el hardware del equipo: la pantalla en sí funciona muy bien y es veloz -con sus 120 Hz de refresco- pero creo que los colores son más bien opacos, lo cual es un problema de los paneles flexibles en general. Además, la capa de plástico que los cubre hace que sea muy fácil que junten polvo. Y lo otro que me llamó la atención es que es un equipo que genera bastante temperatura en muy poco tiempo. Imagino que es por la necesidad de colocar más elementos para que funcione, sobre todo siendo un equipo de gama alta, en dos espacios muy pequeños. El calor no es lo suficientemente alto como para que sea desagradable, pero sí, es algo que se nota.
Por suerte, la caja incluye una suerte de funda que protege al equipo lo más que se puede frente a golpes, pero también bloquea algo de este calor que, convengamos, también ha sido una de las constantes características que han tenido los equipos con Snapdragon 8 Gen 3 este año y que en un dispositivo plegable se nota aun más.
En cuanto a su cámara, el equipo viene con dos módulos principales de 50 Megapíxeles, siendo uno de ellos una cámara tradicional y la otra un telefoto para hacer zoom. También cuenta con una cámara selfie, pero la verdad es que con lo fácil que es usar las cámaras principales como cámara selfie, creo que casi nunca la usarás.
Yo hubiese preferido un ultra wide en lugar de un telefoto, pero entiendo que es difícil colocar más de un lente en una pantalla exterior y que se vea bien. Lo importante es que las fotos en sí son bastante buenas, con una tonalidad algo más cálida que lo tradicional, pero funcionando muy bien en condiciones de mucha y poca luz.
Fotos tomadas con el MIX FLIP
Xiaomi sin duda le está sacando el jugo a su alianza con Leica y el MIX Flip es otro de los teléfonos que opera ante esta alianza. Creo que sacar fotografías buenas es una obligación para un equipo que realmente destaca por su apariencia, y acá lo logra sin necesariamente llegar a ser fotografía al nivel del Xiaomi 14 Ultra. Son fotos que vas a querer subir a redes. Y la posibilidad de poder usar la bisagra del equipo para que funcione como una especie de trípode, también hace que gane interés para los creadores de contenido. Lo que sí, la bisagra no es tan móvil como la de otras compañías que han pasado más tiempo perfeccionando el formato Flip.
Otra de las gratas sorpresas que tuve y que dicen relación con elementos que no es fácil manipular en un teléfono flip es la batería. Son 4780 mAh, los que están muy bien optimizados. De todos los plegables que he utilizado este año, es el que más consistencia me dio en su uso de batería y su carga rápida de hasta 67 Watts lo mejora aun más.
Siendo este el primer teléfono en formato Flip de Xiaomi, debo decir que al menos en lo que respecta a hardware, la tarea está muy bien cumplida: se trata de un equipo atractivo, que funciona como debe hacerlo, de larga duración, excelentes cámaras y rendimiento de primer nivel. El doblez de la pantalla apenas se nota y al doblarse, es un dispositivo que sigue operando bien a pesar de sus 4 pulgadas. Al debe queda, a mi juicio, los colores de la pantalla y un sistema de doblez más robusto.
Donde queda espacio para mejorar es en el software y lograr un paso ininterrumpido entre la experiencia del teléfono completo y su versión miniatura. Y claro, el resto de las compañías han tenido 2 o 3 años para lograrlo; este es el primer Flip de Xiaomi, así que al menos tienen el beneficio de la duda.
Si ya eres fiel a la marca y estabas pensando en contar con un Flip, el MIX Flip tiene lo necesario para demostrar por qué el formato es atractivo, pero si estás buscando el mejor de su categoría, por lo menos en esta ocasión, Xiaomi estuvo a punto de lograrlo, pero erró en la experiencia.