La iniciativa piloto, que tendrá una duración de seis meses, busca definir cómo influye en la productividad la reducción en las horas trabajadas.
La idea suena simple: trabajar un día menos a la semana y seguir recibiendo el mismo sueldo.
Ese es el plan que se aplicará en 3.300 trabajadores del Reino Unido, quienes forman parte de un programa piloto que busca disminuir la cantidad de horas trabajadas, según consignó La Tercera.
Dicha prueba arrancó durante el lunes (6 de junio) e involucra a 70 empresas británicas pertenecientes a sectores a variados rubros, desde la banca, pasando por la hostelería, hasta la animación.
La idea surgió luego de que la pandemia hiciera que distintos directivos se replantearan la manera en que se estaba trabajando, según informó el Diario Financiero. El ensayo tendrá una duración de seis meses para ver cuáles son los resultados, al menos en lo que ha productividad respecta.
Esta iniciativa cuenta con el respaldo de la Universidad de Cambridge, la Universidad de Oxford, el Boston College, la organización ‘4 Day Week Global’ y el centro de estudios sobre el futuro del trabajo Autonomy.
Al respecto, el director del organismo 4 Day Week Global, Joe O’Connor, declaró: “La gran dimisión ha demostrado que en un amplio rango de industrias los empleados pueden producir mejores resultados si trabajan menos y de manera más inteligente”.
En España también han surgido planes que van en la misma línea, mientras que, durante el 2021, Islandia demostró empíricamente que la productividad no sufre problemas tras llevar a cabo un experimentos que involucró al 1% de su población.
Por otro lado, en Portugal impulsan un proyecto para reducir la jornada laboral y en Bélgica los empleados pueden concentrar sus 40 horas semanales en solo cuatro jornadas.
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