“Disparo directo a mi corazón navideño”, comentó un televidente que recién cachó el mensaje.
Un clásico imperdible para compartir en Navidad es nada menos que Mi Pobre Angelito. Una película que sigue haciéndonos reír y llorar aunque nos la repitamos hasta el cansancio. Más aún si de pronto nos damos cuenta de mensajes ocultos tan bonitos como el siguiente.
El destacado analista de cine, Gonzalo Frías, publicó un comentario en sus redes sociales sobre un “emocionante secreto” oculto entre las escenas de este filme.
Se trata del “viejo Marley”, un vecino de los McCallister, la familia de Kevin, el niño protagonista. Como hemos visto, sobre este hombre lo niños comentaban terroríficos rumores, “pero el viejo Marley esconde una de las metáforas más bellas” de la película, comenta el exconductor de Séptimo Vicio.
Bella metáfora
Frías describe que en un encuentro con el viejo Marley en una tienda, Kevin (Macaulay Culkin) se asusta al ver que el sujeto tiene su mano herida, con una venda manchada con sangre.
Más tarde, el niño y el viejo se encuentran en la iglesia y nos entregan un conmovedor diálogo donde terminan dándose la mano. En ese instante, se observa que el hombre tiene un parche mucho más pequeño, en la misma mano que antes había sorprendido a Kevin.
“Estas heridas simbolizan la pelea y el distanciamiento de años con su hijo y no poder ver a su nieta. Y al final de la película podemos ver que Kevin está mirando muy emocionado desde la ventana hacia fuera, porque observa al viejo Marley abrazando a su nieta y notamos que ya no tiene heridas en las manos”, explicó el capo de la pantalla grande.
“Por esto amo el cine, porque las heridas del viejo Marley fueron cicatrizando, fueron sanando durante toda la película y díganme si ese no es un bello mensaje y valor para compartir”, cerró Gonzalo Frías.