La marca surcoreana presentó, en el evento CES 2025, su nuevo televisor que viene recargado de mejoras impulsadas con la IA.
Luego de que las compañías tecnológicas fallasen completamente en su apuesta por la realidad virtual, lo que significó pérdidas millonarias, su nuevo impulso está dando mejores réditos en lo que concierne a la inteligencia artificial (IA).
Por eso no sorprende que la compañía surcoreana Samsung, como parte de sus presentaciones en el evento CES 2025, se la jugase principalmente por impulsar su nueva línea de televisores con mejoras impulsadas por la IA.
A la cabeza de todo está una nueva pantalla Neo QLED 8K, con el modelo QN990F, ya que a las compañías tecnológicas no se les ocurren nombres más atractivos o fáciles de recordar por los consumidores.
Como su modelo de tope de línea - lo que implica que será su equipo con las mejores prestaciones y, por ende, el mayor costo -, la compañía presentó un televisor de tamaño súper delgado y minimalista que hace uso del poderoso procesador NQ8 AI Gen3 con capacidades de inteligencia artificial.
En ese sentido, las siguientes son sus principales características para mejorar la calidad de imagen:
- Escalado 8K patentado (8K AI Upscaling Pro). Es decir, el televisor toma un contenido que tiene una resolución más baja (como 4K o incluso SD) y lo mejora para que se vea en una pantalla con resolución 8K. A grandes rasgos, el televisor “rellena” los píxeles faltantes con un procesamiento con IA que permite que se vea más nítida y detallada en la pantalla de alta resolución.
- Remasterización HDR cuadro por cuadro (Auto HDR Remastering Pro), lo que permite mejorar la calidad de imagen al convertir contenido SDR (rango dinámico estándar) en una versión mejorada similar a contenido HDR (alto rango dinámico). Aquello implica que los colores, los contrastes y los detalles se vean más realistas y llamativos, incluso en contenido que originalmente no fue creado con HDR.
- Potenciación del color (Color Booster Pro), dando más intensidad, precisión y riqueza de los colores en la pantalla para que las imágenes sean más vibrantes y realistas. Lo anterior se hace analizando los colores de cada cuadro en tiempo real, ampliando los colores que se muestran en pantalla y, con el uso de IA, se pueden mejorar los colores en función del tipo de contenido que se está viendo, ya sean películas, contenido deportivo o videojuegos, entre otros.
Siguiendo los esfuerzos que ya hecho la compañía en el último año, este televisor de Samsung también cuenta con mejoras de sonido adaptativo y un modo IA para optimizar la presentación tanto de la imagen como del sonido en base al contenido que está en pantalla.
Finalmente, el otro detalle importante es que el modelo alcanzará las 115 pulgadas de tamaño, superando el máximo de 85″ de las pantallas anteriores de Samsung.
