El hecho fue ampliamente criticado por los chilenos, pues consideraron que es insalubre que hayan mechones de pelo en el suelo y volando en el aire de la playa de Cartagena.
¿Te imaginas estar paseando por la playa, con el viento soplando en tu rostro, cuando de repente, un mechón de pelo choca contigo? Algo así le podría pasar a quienes vacacionan en Cartagena.
Y es que un reciente video que se viralizó en redes sociales muestra que, al lado de los ambulantes que se posicionan en la costa de Cartagena, un peculiar servicio “abrió sus puertas”: una peluquería, donde no necesitan barrer el cabello que cae tras cada tijerazo, pues el viento se lo lleva hacia la arena.
El registro levantó opiniones negativas entre los internautas, pero también se discutió en la televisión, en el matinal Buenos días a todos, donde el periodista Eduardo Fuentes criticó que este tipo de servicios se ofrecieran en un lugar turístico.
Esto fue lo que dijeron los usuarios sobre la “peluquería”.
La peluquería en Cartagena levanta críticas entre los chilenos
Una silla, una máquina rasuradora, tijeras, una capa de peluquería y un delantal. Esos son los únicos utensilios que se ven en el video viral, donde se ve a un hombre cortándole el pelo a otro, en plena playa de Cartagena.
Mientras tanto, al fondo se ven a personas disfrutando del mar y la arena.
“Me tenís que estár huev…”, dijo el usuario que compartió el video. A la crítica del internauta, rápidamente se le sumaron otras personas que tildaron la “peluquería” como una “degradación” y “asqueroso”.
“¿Y quién chucha recoge los pelos? Puestos de comida, familias descansando en la playa y en un suspiro te comiste un pelo... por la chucha”, comentó otro.
Otra opinión sacó risas de algunos: “Y así nació el melón con pelos”.
Según los usuarios que comentaron, cortarse el pelo en la calle es normal en otros países, como Venezuela, pues los precios suelen ser mucho menores a los de una peluquería establecida.
Aún así, los internautas chilenos condenaron el hecho y también se cuestionaron por qué las autoridades no fueron a fiscalizar al peluquero, pues podría representar un peligro de salud para quienes atienden a la playa a relajarse.
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