Este geólogo de profesión, con antecedentes en la música electrónica y hombre detrás de varios hits importantes del último tiempo, cautivó con su estilo al Conejo Malo y formó parte de su disco “Debí tirar más fotos”, trabajando en un tema junto al afamado productor Tainy. A La Cuarta entrega sus sensaciones y reflexiones sobre este momento tan especial para su vida y carrera, además de hacer un balance sobre el esfuerzo que lo llevó hasta aquí: “Me cuesta resumir esto en una sola palabra porque hay cosas buenas y cosas feas, hay de todo”.
“Ha sido una locura, mucho más de lo que pensaba que podía ser”.
De esta manera resume estos últimos días Cristóbal Díaz (34), mejor conocido en el panorama urbano como Dysbit, quien ha captado la atención de la prensa especializada y los fans tras poner el timbre de la escena nacional en el nuevo disco de Bad Bunny Debí tirar más fotos, lanzado el domingo 5 de enero. En específico, participó como productor del segundo track, “Voy a llevarte pa PR”, donde también cooperó el reconocido Tainy, parte fundamental del sonido del reggaetón hace ya varios años con sus producciones.
“Es jugar con el Real Madrid y meter un gol”, define este momento de su carrera el antofagastino, quien ha tenido que dar una vuelta larga.
El nortino comenzó en la música electrónica antes de pasarse al género urbano, trabajando inicialmente con artistas de su zona. Además, confiesa que una de sus grandes inspiraciones fue el boricua Musicólogo.
“Esos sonidos, arpegios, arreglos... me gustan. He podido aplicar eso, pero de una manera más contemporánea, y ha resultado bien”, confesó al Diario Pop.
El sello de este geólogo de profesión y puntaje nacional de matemáticas está patente en placas como +xqa (2021), Sorry, estoy en mi darkera (2023) y Días antes de la darkera (2023), proyectos en los que trabajó con su fiel compañero de labores Easykid. También dejó su huella en canciones de Los 4F, Kidd Voodoo, Drefquila, Nyruz, entre otros.
—Y cuéntame, ¿cómo estás llevando toda esta cosa mediática? Porque no solo ha sonado acá, sino también en el extranjero, junto a Bad Bunny y Tainy, los GOATs del género urbano latino en estos años recientes…
—Verdad, me ha costado procesarlo porque la noticia llegó muy de golpe. Yo no me enteré de esto hasta el 2 de enero, como al mediodía. Entonces, que de la nada te digan: “Oye, vas en el álbum de Bad Bunny, en una colaboración con Tainy”, es chocante para uno que se dedica a esto. Los primeros días me costó aceptarlo, había un poco de ansiedad, de dudas, pero al final salió todo bien y eso me tiene muy contento. La canción me gusta mucho.
—Llevas harto tiempo en esto, siendo una especie de escudero de Easykid. Primero eran parte importante del under, después llegó la Darkera y se pegaron tanto acá como afuera. Ha sido un recorrido también…
—Lo que dices es cierto. Llega un punto en que te podís poner un poco nostálgico porque mirái para atrás. Al final, cuando uno empieza en la música, es pasar hambre, pero con el tiempo las cosas se van dando. Es súper bonito en verdad y hay que dar gracias a Dios, a las personas que uno conoce, que creen en ti, a los artistas con los que trabajas, como el Voodoo o el Easy, que son buenas personas. Todo eso ha provocado que pase esto.
—¿Y qué te dice Easykid?
—Sí, está contento, y al final todos los cabros lo tomaron como un logro propio. Eso fue muy lindo.
—Como te dije antes, siento que Sorry, estoy en mi darkera fue el trampolín para ambos, una parte importante de lo que les ocurre hoy…
—Sí, tienes razón. Es como lo que tú decías antes, el paso del underground a algo más mainstream, donde te reconocen a nivel más general.
—El Easykid me dijo una vez que con esto de la Darkera encontraron su sonido definitivo, ¿lo crees así?
—Sí, de hecho, lo que estamos trabajando con el Easy está bien tirado hacia esa línea musical.
“Escucho el beat que canta Bad Bunny y es mi sonido”
—También me acuerdo que cuando salió el álbum de Bad Bunny, le dije a mi hermanito chico: “Oye, hay un chileno en el álbum del Conejo, el Dysbit”. Y me respondió: “Ah, sí, ‘Voy a llevarte pa PR’, suena como el Easykid”.
—Ja, ja, ja, me dijeron lo mismo, que era como una intro que fácilmente podría haber cantado el Easy.
—Eso igual es bonito porque estás marcando un sonido…
—Por eso para mí fue tan emocionante. Escucho el beat que canta Bad Bunny y es mi sonido, lo que he generado, lo que a mí me gusta.
—¿Y cómo ha sido todo este proceso? ¿cómo llegaron a ti? Supe que fue por el publishing…
—Yo trabajo con gente de Miami, se mueven un poco más como en interno…
—Mandaste un banco de beats, creo…
—Sí, mandé un folder. Como variado y, en verdad, sin mayor expectativa. Fue un poco de todo: cosas melódicas, cosas de esto y este sonido que a mí me gusta, un poquito más oscuro, más perreo, bien en menor musicalmente. Y pasa el tiempo, me dicen que mande los stems —que son los archivos divididos del instrumental—, después me los piden de nuevo, y me avisaron de un día para otro que iba en el disco de Bad Bunny.
—Este beat es del 2023, por lo que dijiste a Matías Alegría…
—Diciembre de 2023. El beat estuvo flotando un año entero, pero esperaban cosas grandes.
“Hay cosas buenas y cosas feas, hay de todo”
—¿Cambió mucho la instrumental? ¿Tainy puso mucha mano?
—Mira, no sé qué tanto puedo hablar de eso, de cuánto hizo él, pero lo que suena es que le subieron un poco el tono y un poco la velocidad. Sí se nota que las baterías son de Tainy, y eso rompe duro por él, pero la parte melódica es toda mía. Por eso la intro y las melodías son mías.
—Y haciendo igual una recapitulación para ti, desde tus inicios hasta esta colaboración con Bad Bunny, ¿en una palabra y por qué?
—No sé, hermano. A ver, tírame tú una palabra bonita, porque me cuesta resumir en verdad en una palabra esto, ya que hay cosas buenas y cosas feas, hay de todo.
—Pero esto de “Voy a llevarte pa PR” es uno de tus mejores momentos…
—Hay momentos que hay que guardar, pero esto es un top 1. Uno, porque nunca había tenido tanta prensa, tantos comentarios, tanto de todo. Hay otros momentos que igual son emocionantes, más privados, tal vez como los viajes, cosas lindas que pasan. En la llamada me dicen que voy para el disco de Bad Bunny, lo logramos, pero cuando me dijeron que la coproducción es con Tainy, ahí ya exploté.
“Fue un boost de mucha energía”
—¿Pero para llegar aquí también hay momentos bajos?
—Es que hay períodos, claramente. El intervalo entre +Xqa y La Darkera, creo que tuve un bajón. Porque en +Xqa le fue bien, llegamos a un punto, pero los gastos, todas las cosas… Yo soy papá, entonces necesitái estar generando un volumen de plata que, de pronto, la música no te la da tan continuo. Me tuve que reinventar, yo soy geólogo, así que me metí un rato en eso, pasaron cosas y al final volví al 100%. Desde que tomé esa decisión fue solo para arriba.
—Ahora, con lo que pasó, se abren las puertas...
—Sí, en verdad esto me dio mucha fuerza para meterle más ganas, ser más creativo. Fue un boost de mucha energía y lo voy a aprovechar. Voy a hacer lo que sé, lo que he hecho todos estos años.
—¿Qué más se viene en tu carrera?
—Hay de todo. Vienen los proyectos del Voodoo, del Easykid. Colaboraciones que no sabes si van a salir. Pero hay harto trabajo, así que van a escuchar harto de mí este año.
—Un mensaje para la gente que te sigue...
—Para la gente que me sigue y que me ha apoyado desde el principio, muchas gracias, porque en verdad, de pronto, esas palabras, esos mensajes de apoyo, de “oye, hermano, esto está sonando bien, tu sonido”, dan fuerzas para seguir dándole, para seguir creyendo. Y a la gente que se quiere dedicar a esto, que tiene sueños, les digo que le metan fuerte, que en algún momento las cosas se dan, aparecen las personas correctas y uno puede ir logrando cosas.