El conocimiento de Jonas Sanche

La historia bíblica de David, un novel y enjuto pastor de ovejas enfrentando a Goliat, un guerrero gigante de tres metros, tiene varios niveles de interpretación.

Para un creyente tiene que ver con que la fe en Dios es tan poderosa, que se puede enfrentar cualquier ad-versidad y salir victorioso. Otra perspectiva, menos religiosa pero no menos espiritual, interpretará la leyenda con la idea de que los mayores obstáculos, limitantes, de una persona, comienzan en su propia mente.

Según el estudioso del cristianismo metafísico, Jim Lewis, esa historia busca ilustrar respecto de que existe una idea equivocada respecto de las habilidades y los poderes que tenemos para lograr objetivos. Esta inseguridad y análisis equívoco, asegura, termina por crear un gigante que intimida y muchas veces paraliza.

David Castillo Sánchez nació un 21 de diciembre de 1987 -comparte cumpleaños con Samuel L. Jackson y Frank Zappa- en Antofagasta. Su camino en el hip hop sin embargo comenzaría en Santiago, entre Puente Alto y La Florida.

“Zaturno (Tiro de Gracia) me decía que en el fondo yo no tenía escapatoria. El Epicentro (Calambre) me dijo lo mismo: voh erai rapero o erai rapero. Y yo siempre quise ser un rapero”, contaba el 2016 a Noisey.

David, más conocido como Jonas Sanche, se tomaría ese decreto tan en serio que, según sus cercanos relatan en el documental Street Documents, incluso durmió en el escenario de la Rapjaus, una icónica casa-club, donde el maestro de ceremonia Kaenedos atendía y recibía junto a su familia a una naciente nueva escena rapera underground, a principios del Siglo XXI.

Un joven y entusiasta David, estudiante de técnico en sonido, destacaría rápido por su vertiginoso talento con las palabras. Tras pertenecer a las bandas Encasa y KTF Clan, el 2012 lanzó Verdades La Voz de la Avenida, un disco que lo catapultó a la fama.

Sobre V.L.V.D.L.A. el periodista y autor de Historia del Trap en Chile, Ignacio Molina, escribió en la citada nota para Noisey, que el disco “se convirtió en un clásico instantáneo y una suerte de continuación del Illmatic de Nas: más que rimas, Jonas escribe crónicas callejeras en primera persona. Es una autobiografía en donde aparecen y desaparecen sus propios fantasmas”.

Entre giras, tocatas y fiestas, algo comenzó a quebrarse dentro de David.

“Empecé a cometer errores, cebarme, hacerme zancadillas, eso repercutió en que la gente se empezó aburrir de mí”, reconocería el mc en su propio documental. “La fama lo desconcentró un poco, se preocupó mucho del qué dirán, fue fuerte”, complementa en la misma pieza audiovisual Tomás “Four D” Alzamora, quien fue su DJ en vivo y uno de sus primeros socios, una amistad que llegaría a lugares insospechados años después.

Párrafos largos

“El talento no sirve de nada sin disciplina y constancia. No importa de donde vengan, hay que hacer las cosas de corazón, eso es lo único que representa”. La frase la pronunció un emocionado pero serio Jonas Sanche el año 2021 al recibir el premio Pulsar a mejor artista urbano.

Ese mismo año, invitado al programa La Junta, el cantante profundizaría en la idea. “Me gustaría decirle a los jóvenes que a veces recibir adelantos, tocar mucho, recibir mucha plata, puede jugarte en contra. La indisciplina, inmadurez, la droga, ser llevado de tus ideas, no escuchar, te puede llevar a la ruina (...) Por eso hice ese documental, la idea era mostrar que puedes estar en la tapa y estar también abajo”.

Se refiere a “Street Documents”, un íntimo registro en clave autobiográfica que cuenta el peregrinaje de Jonas para sacar adelante su segundo disco 27. Uno donde el artista describe como bregó no solamente contra la presión de un trabajo que continuara el hit de V.L.V.D.L.A, sino que con el duelo de perder a su abuela Yolanda, personaje clave en su vida y obra, tener que buscar y mantener un lugar donde vivir junto a su hijo como padre soltero y artista independiente en Chile, y un David en constante conflicto con Jonas.

En medio de todo eso, que David definirá en su capítulo de “La Junta” como “más duro que la mierda”, Jonas se las ingenió para publicar Cream Gang (2013) en conjunto con Ceaese. El track número 5 de ese disco se titula “Trap”, un concepto que para ese entonces ni se asomaba a la masividad.

“Es interesante, pero tampoco fuimos los primeros en hacerlo (trap), ni crank ni dirtysouth, porque ya estaban G Flow, Cris Gomez, Downzouthkingz (algo asi como la versión beta de Nación Triizy) y Zonora Point”, reconoce Sanche en entrevista con Lúcuma.

También apareció como feat en el disco del entonces debutante NFX; la icónica “Día y Noche” junto a Chystemc y Liricistas, y “Niñita del mar” con Denise Rosenthal.

Pero probablemente la canción que más define esa época es “Infinito”, cuyo video fue dirigido por Tomás “Four D” Alzamora, que en ese entonces ya se erigía como director de cine. Para su película debut “La Mentirita Blanca” (que ganó mejor guión en el Miami Film Festival) le pediría a Jonas que actúe, compartiendo créditos con Catalina Saavedra y Rodrigo Salinas.

Finalmente 27 terminó viendo la luz en febrero del 2019, a pocos meses del estallido social chileno, uno que se palpitaba en las letras de ese trabajo.

“Mis vivencias vienen de haber esperado horas en el Sótero del Río durmiendo junto a vagabundos, de entrar con mi abuela en brazos al hospital y tener que pelear por una camilla. También experimenté con mi hijo el sistema educacional público y vi la abismal diferencia que hay entre la educación en Puente Alto y Ñuñoa. He vivido las negligencias de este sistema de mierda”, dirá al respecto en La Junta.

El disco, no tuvo la repercusión que el artista esperaba. “Me cuestioné la falta de atención de los medios, pero de gira en España caché que era un tema cultural, que tenemos el mal de la feria navideña, cuando algo está de moda todos los están vendiendo (...) pero va en uno que se de vuelta la tortilla, de mis ídolos, el colectivo Griselda, aprendí que se puede y que hay que sacarse la conchesumadre”, decretaba en entrevista con Lúcuma.

Allí también definía “Párrafos largos”, como la mejor canción que ha escrito.

A renglón seguido, el 2020 y en plena pandemia, publicaría el disco Aire y también Crack, un EP colaborativo con el venezolano Lil Supa, quizá el exponente más serio y respetado del hip hop en español en la actualidad y la cara más visible del colectivo de rap El Dojo, con quienes el chileno tiene también vínculos.

El conocimiento

“Puta que tiene datos este hueón”, repite en varias ocasiones Julio César Rodríguez en el cap. de LJ. Jonas se ríe. “El Chystemc me dice Conan” (en referencia al manga detective Conan), responde.

En esa y en las otras entrevistas mencionadas, por momentos cuesta seguirle el hilo a la velocidad y las ramas por las que se esparcen las ideas que David plantea. “Soy muy disperso”, se disculpa permanentemente. Es como si pensara en barras, en párrafos largos. Su manejo de nombres e información de personajes que componen el ecosistema de la música es profundo y fluido.

“El conocimiento es poder”, dirá en La Junta. “Soy un enfermo, un obseso”, explicará en Lúcuma. “Estoy siempre aprendiendo de cosas que le puedan servir a mi música y transmitir conocimientos que le den poder a mi barrio. Hay que desprogramar lo que nos han enseñado viniendo de sectores de riesgo social, de clase media baja, de endeudados”, explicará a JC Rodríguez.

En mayo de este año y editado por Warner, Jonas Sanche lanzó “Da Knowledge”, una sólida y estricta pieza de hip hop sobre la que el cantante dirá a Sunderbeats que “lo que el destino nos depare los aceptamos con humildad, hasta ahora seguimos conformes y nadie nos puede reprochar nada porque lo dimos todo y eso nos deja tranquilos”

“En este álbum para ser sincero, la única influencia no fue musical: fue el hábito y la disciplina, y eso me lo han dado las nuevas generaciones. Musicalmente es un disco clásico del sonido de Macrodee conmigo, y lo que se puede esperar de nosotros es la seguridad y madurez en las letras y en todas sus barras, además de la constancia del proyecto que nos permitió que el resultado fuera lo óptimo”, contaría en entrevista con Zumbido.

“Jose Space, productor y hermano, amigo, me hizo entender que no soy Jonas Sanche, el rapero. Puedo ser actor de cine o cantar con Denise Rosenthal. No soy solo un rapero, aunque soy un hip hop soldier. Siempre voy a estar en el rap, pero no tengo que demostrarle nada a nadie ni tampoco cerrarme a cosas”, reflexiona en Lúcuma.

“Todo lo que he logrado y voy a lograr es por la bendición que tengo de tener a mi hijo. He luchado y voy a seguir luchando, siguiendo el ejemplo de mi mamá y mi abuela”, dijo el cantante en La Junta.

En la historia bíblica, David se enfrenta a Goliat y de un peñascazo certero en el entrecejo lo derrota. Luego con la misma espada del adversario, le corta la cabeza y la trae de vuelta a su pueblo.

“Yo vengo de vuelta de las estupideces de la juventud”, decía el cantante en la entrevista a Lúcuma. El 2022, Jonas Sanche parece haber vencido a su propio gigante.