El profesor Berrios aka Bronko Yotte anuncia el fin de la clase

Bronko Yotte.
Bronko Yotte.

Felipe Berrios aka Bronko Yotte, a sus 45 años, está próximo a lanzar su nuevo disco “Profe” y además pensando en colgar el micrófono, poniendo fin a una de las carreras más consistentes, experimentales y de bajo perfil que el rap chileno ha conocido. Acá su historia.

A sus 45 años recientemente cumplidos, Felipe Berrios aka Bronko Yotte ha dicho que ya piensa en el final de ese proyecto, de ese aka.

Así lo expresó en el programa “Escápate” de Fabrizio Copano y Camilo Salas:

“Hay que pensar en los cierres, en los términos de ciclo. Quiero hacer las cosas bien y terminar en alto. Bronko Yotte no lo visualizo como algo eterno y pensar en eso me ha hecho disfrutarlo más”, explicó el cantante para sorpresa de sus interlocutores que no se esperaban una declaración así en medio de la promoción de su próximo disco “Profe”.

“Por supuesto que no es algo próximo o inmediato. Pero sí estoy en un momento en el que pienso en otras cosas, en otros proyectos. Quizá otro lugar en la música, como gestor, productor, que sé yo, pero me veo haciendo cosas interesantes desde otro lado, empujando a que exista la música que me gustaría escuchar”, explica.

Berrios menciona que son varios los factores que lo han llevado a ese pensamiento. El principal, asegura, es la edad y ser padre. Ser el papá rapero da un poco de cringe, bromean en el espacio. Y medio en broma y medio en serio, Berrios está de acuerdo.

En el comienzo de su carrera sorteó con éxito ser el profesor rapero. Esta nueva etapa la enfrenta así:

“Pienso por ejemplo en Dr. Dre, que firmaba discos donde estaba un poco más atrás, donde no todos los beats eran de él y cantaba en algunas canciones, pero el mundo de ese disco era su creación. Ese tipo de ejercicios me gustan”, dice.

En conversación con la periodista Daniela Aguayo de La Cuarta dejaba algunas pistas de esa misma idea: “Las influencias de este disco -’Profe’- están en el rap alternativo que se está creando en todas partes del mundo, desde Tyler The Creator para abajo. Yo me siento super inspirado por sus ideas y de tratar de contribuir y generar un espacio de música alternativa en Chile también. No se trata de mi, quiero que también se trate de mucha gente que está haciendo música bacán que no siempre es reguetón, sino también hip hop o R&B”.

Músico de rap

El punto de partida de esta historia, sin exagerar, data de hace 38 años. Hace casi 4 décadas, lo que vendría a ser aproximadamente el doble de la edad promedio de las y los artistas del género urbano, Felipe Berrios se subía a un escenario por primera vez.

Y en la tele. Lo hacía en el programa Festival de la Una en un segmento llamado “Festiniños”. Ahí el pequeño Felipe, de 7 años, se subió al escenario para interpretar la canción “1,2,3 vamos a jugar”.

El tierno momento está documentado en el comienzo del videoclip para la canción “Otro lo tiene” del disco “Con eso lo digo todo”.

La historia la cuenta en el podcast “Podcafecito” de Audiomusica: “Mi papá salía a cada rato en la tele y yo siempre canté, de bien chico como que tenía oído, entonces mi papá cachó y me llevó”, cuenta.

El contexto es que el padre de Bronko Yotte era cantante en el grupo de neo folklore Santiago 4 y solía presentarse en programa de la época como Sábado Gigante. Sin ir más lejos, en el podcast de Copano contó que la casa en la que creció fue una que su papá ganó en uno de estos programas. Ahí también reveló que participó en el casting masivo de “Protagonistas de la música”, el histórico reality del año 2002.

Pero volvamos al pequeño Felipe cantando en la tele:

“Subirse a un escenario, enfrentarse a esa situación y tener que cantar de memoria una canción completa e interpretarla fue una experiencia fuerte, pero aprendí bastante de eso. Me costó, me acuerdo que me puse muy nervioso y se me olvidaba la letra. Mi papá me tuvo que contener, pero después, cuando salió bien fue una tremenda emoción y desde que me cautivó la música. Digamos que siempre fui pintamonos, desde chico”, recuerda.

De ahí para adelante se empezaría a desarrollar una maciza y consistente carrera, quizá única o a lo menos pionera en su clase, que ha construido improbables puentes entre el indie y el rap.

Bronko Yotte ha tejido colaboraciones, entre otros, con Cristóbal Briceño, Felicia Morales, Ambar Luna, Matías Cena, Ceaese, Jonas Sanche, Camileazy, Mantoi, Motafonkas, Jamez Manuel, Gianluca, Cami y Gepe. Durante gran parte de su carrera ha ejercido como su propio productor y en vivo, la dirección musical está a cargo de su hermano Martín.

“Hay músicos cuyo fuerte principal es el rap, otros son más de guitarra, algunos destacan en la composición o en el folclor... Pero al final, la experiencia de hacer música es lo que nos une y por eso podemos compartir el mismo espacio”, explica en un muy completo perfil de Música Popular.

En el citado podcast “Escápate” dice: “Nunca aprendí a tocar bien guitarra, así que me siento barsa diciendo que soy músico. La verdad es que vi en el rap una forma accesible para mí de hacer música para mi, obviamente también me gustaba mucho Tupac, Notorious, y el Ser Humano! de Tiro de Gracia salió en mi último año de colegio”.

Un resumen biográfico, en fast forward, sería más o menos así: El año 1999 forma el colectivo Rapaces junto a Lister Rossel. Rapaces sacó un disco el 2003 lanza su primer disco. Después como solista editaría: Piensa en mí cuando duermas (2006), Vive el nivel (2009), Superharto (2010), Con eso te digo todo (2013), Gala (2015), Nimbo (2017) y Fuero Interno (2020).

El lanzamiento de su primer disco incluiría un hito fundacional. “El 4 de enero de 2007 fue el primer show en vivo, importante, como solista, fue en sala Master”, recordó en una reciente entrevista hace poco. Para ese concierto llegó a debutar como corista Macarena Campos aka Másquemusica. De ahí para adelante consolidaron una sólida dupla.

Es 2024 y Bronko Yotte está próximo a lanzar “Profe” su nuevo disco en referencia al trabajo como profesor de lenguaje que ejerció en paralelo a su carrera como músico, hasta el año 2016. “A veces anda bien y otras más lento, pero me he podido mantener”, afirma.

“En realidad son más lentas las carreras low perfil, pero me identifico más con esa manera de apróximarme al trabajo”, dice.

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