King Savagge: el reinado salvaje que salió del pantano

A sus 24 años, la vida de Sebastián Salvo ha cambiado rotundamente.

“Es brígido. Brígido. Cuando paso por un patio de comida miro y pienso, yo estuve ahí igual que esa gente que se está esforzando en esos trabajos. Y cuando estaba ahí soñaba con lo que está pasando ahora, donde estoy”, contó en La Junta el año 2022.

“A mí no se me cae el pelo por decir que trabajé en una pizzería, me tocó hacer masas, cajas, de todo”, agrega. El cantante explica que cuando trabajó en el patio de comidas ya había hecho una canción que había metido harto ruido. “Me daba cosa que me vieran pero al final dio lo mismo”.

El camino de King Savagge a ser uno de los artistas chilenos a presentarse en la versión 2023 de Lollapalooza y ser fichado por el sello Rimas ha sido largo.

“Se dio brígido la vuelta. Y se tenía que dar porque la estamos buscando de ultra menor, grabando con cajas de huevo en estudios con micrófono tapado con un calcetín, grabando hasta las 8 de la tarde nomás porque después llegaba la mamá de mi amigo, y de ahí ya no se podía”, recuerda en el nuevo webshow Con la Musa.

En ese mismo espacio cuenta que hoy día vive en La Florida junto a su pareja y su hijo de un año y medio. “Es corte condominio, pero extraño el barrio. Eso de salir al almacén a comprar, encontrarse con los amigos y fumar un pitito, ir a la barbería. Donde vivo hoy día no hay eso”, dice.

A Julio César Rodriguez el cantante de “2 hielos” junto a Jere Klein le contó sobre su infancia. “Me crié en la población Santo Tomás, en La Pintana. Cuando más nene vivía en una mediagua, con mis papás, atrás de la casa de mi abuela. Hasta que les salió una casita, que ahora la ampliaron y quedó maldita”.

“Ahí fueron mis primeros rapeos, me gustaba la vida del reggaetonero, de millonario, la vida de lujos me llamaba la atención. Yo veía que en Chile en esa época había puros raperos, un reggaetonero era considerado una chala, pero no veía que los raperos fueran millonarios entonces no me atraía. Eso sí, de chico que me gusta rapear, con el tiempo me empecé a introducir en otros ritmos, pero el rap fue lo primero”, reconoció.

Eso sí, en todas sus entrevistas King Savagge reconoce como su principal influencia al puertorriqueño Cosculluela.

El inicio de año de King Savagge ha sido de alta intensidad. El fin de semana pasado, mientras se presentaba en el club Herradura de Calama y en circunstancias que la PDI investiga pero que aún no tiene detenidos, un joven de 18 años murió y 6 personas resultaron heridas producto de una riña que terminó con balazos. El artista se manifestó conmovido por la tragedia, condenó la violencia y contó que se había puesto en contacto con la familia de la víctima fatal para ofrecer sus condolencias.

A principios de esta semana la cantante Paloma Mami interpretó en el Festival de Viña “Nopalatele”, la canción que grabó junto a Savagge y AK 420, hecho que el artista valoró también en sus redes. En otra storie anunció un próximo show en México, en lo que parece ser su norte fijo: internacionalizar su carrera.

“Apunto a que mi carrera dé un salto. A sonar en otros países”, dijo en una reciente entrevista con Vamo a Calmarno.

“Yo soy visionario brígido, y tengo un gran equipo detrás. Creo que eso es importante, saber recibir consejos, tener gente que te exija y encamine. Yo siento que he dado recién el 5% de lo que tengo, gente que te encamine, exija cosas”, contó en Con la Musa, donde además recordó que en sus inicios él mismo buscaba lugares donde cantar, sobre todo en bingos y eventos a beneficio.

En cuanto a producción de música, lo más reciente de King Savagge son los sencillos “Outfit” junto a Cestar de Shamanes y adelantó una colaboración junto a Young Cister.

El rey salvaje y Dios

“Vengo de una familia evangélica, muy humilde y muy religiosa. Para ellos la música era droga y perdición. O sea, cuando mi mamá escuchó mi primer hit que era “No hablís maldito” o sea imagínate, fue brígido. Yo creo que si me hubieran apoyado de un principio, así en el sentido de decirme dale tu corte, capaz me pegaba antes, pero tuve un proceso diferente nomás”, contó en La Junta.

En Con la Musa agregó: “Cuando tenía 11 o 12 hice mi primera canción, a esa edad yo guardaba un cuaderno con todas mis letras, una vez mi mamá me las pilló y yo le dije guarda eso porque un dia va valer mucha plata”

“El sueño de mis padres era que estudiara y sacara una carrera, pero de chico mi sueño fue la música. Mi mamá siempre lo supo, porque me veía haciendo freestyle, grabándome en la casa, pero pensaba que era un hobby. Entonces cuando me quise salir de la carrera fue fuerte para ellos, pero yo sabía que tenía un talento aunque la música en ese momento no era tanto una opción como ahora, por eso trabajé en la constru, en comida rápida, me la buscaba”, relató en Vamo a Calmarno.

A Julio César le contó en detalle que estudió la carrera de Recursos Humanos pero que la abandonó. “Dejé de estudiar porque la música era lo que me llenaba y hacía feliz, pero ya me habían pagado dos años de carrera, para ellos fue muy difícil. Hoy día están orgullosos y se alegran por las cosas que me están pasando”, asegura.

“Yo creo mucho en Dios, todo lo que hago es en su nombre, me considero un hombre de mucha fe”, agregó respecto de la herencia de sus padres. Sería también gracias a la relación de sus progenitores que conocería a su actual pareja, con quien tiene un hijo de un poco de menos de dos años.

“Nuestras familias, como eran cristianas, hacían juntas de familia y ahí nos conocimos. En ese tiempo yo estaba bien relacionado con la calle, a la vista de su familia yo era flaite, y bueno yo soy flaite, entonces para ellos no era fácil, ella era de La Florida y yo de La Pintana, tenía todo en contra”.

En entrevista con Chilevisión, el cantante de “Cochinae” junto a Juliano Sosa, contó sobre la importancia que tuvo la paternidad en su vida: “Lo mejor que me pudo haber pasado en la es haber sido papá, porque estaba en un proceso donde no sabía lo que quería. No sabía si ser cantante, si estudiar, si estar en la calle. Entonces la noticia de Emiliano, mi hijo, fue un impacto grande en mi vida (...). Por él yo chanté' cabeza y dejé muchas cosas de lado, amistades de la calle que quizás no me convenía, cosas que yo hacía antes. Cuando supe que iba a ser papá, no estaba brígido en la música. Estaba haciendo números, pero no tenía plata. Entonces dije ya, tengo que ponerle brígido o trabajar, como cualquier otra persona. Le metí tanto énfasis que gracias a Dios se está logrando. El guatón llegó con la marraqueta bajo el brazo”, asegura.

En Vamo a Calmarno explicó sobre la posibilidad de grabar un disco. “Hasta el momento he soltado puros single, porque tengo una estrategia y sé que no tengo todavía el público que quiero tener para soltar un disco o un EP, lo que sí sé es que cuando lo haga va a ser 100% comercial. Pero yo no pienso tanto en salir en la radio por ejemplo, pienso en premios, un copihue por ejemplo, pero un grammy no estaría nada de malo”, dice.

En entrevista con CHV explicó: “En todos lados he dicho que soy un claro ejemplo de que los sueños se cumplen. Yo empecé como un niño con un sueño de querer ser cantante reconocido y ayudar a mi familia. Gracias a Dios ahora se está cumpliendo y lo estoy haciendo realidad. Vivo solo y puedo decir que la música es mi trabajo, el ingreso de mi hogar. Le digo a la gente que sí se puede, a los niños más que nada. Yo me acuerdo que antes todos querían ser futbolistas, y ahora todos quieren ser cantantes”.