Doctor:
Yo creo que lo del amor no es lo mío. Como que eso de estar de a dos y haciéndose añuñús no me calza. Soy de esos fracasados, porque vaya que lo soy, que no dura más de dos meses de relación. Y no es que yo sea pastel... Sucede que existe como un estilo de magia que hace que me dejen.
A mis 30 años, le cuento que llevo siete relaciones perdidas. Unas bien como nada, otras hasta compartiendo departamento. Es como que llegara el segundo mes y ¡paf!, me llega la patada final.
Pero no soy el único. Mi mejor amigo lleva la misma cantidad de desilusiones amorosas y le pasa algo muy parecido a lo mío. Llega el segundo mes y nos dejan mirando el techo.
Llegó a tanta esta mala suerte que le buscamos el lado amable y apostamos a quién llegaba primero a las 10 PLR... Hemos pensando en qué cosa apostar, pero aún no se nos ocurre. ¿Qué le tinca a ud.?
Desilusionado
Querido enanito:
Me recordó al personaje "Mala Suerte", ese que salía en "El Show de Pebbles y Bam Bam" y que donde iba lo seguía una nube negra sobre la cabeza. El de los hijos de Pedro Picapiedra y Pablo Mármol... ¿No lo conoce? ¡Métase a Google!
Pero no, usted no es un mala suerte. Usted es una persona que llama a la mala suerte, si es que existe ese término de la triste fortuna.
Y si fuera así, me han contado de la "ley de la atracción positiva", esa que basta en pensar en algo bueno y mirar el lado amable de las cosas para que resulten a su favor.
Sin embargo, lo suyo y lo de su amigo me suena más a tontera y a consuelo de pajarones. Usted está predispuesto a terminar las relaciones y, haga lo que haga su pareja, algo hará para que suceda este "infortunio".
Y en cuanto a la apuesta... Déjese de leseras y si quiere algo serio arriesgue por superar esos dos meses... Buena suerte.
Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com
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