Necesito que me autorice a volver con mi señora. Me ha engañado cinco veces y ahora sí que me dijo que nunca más me pondrá el gorro.
Doctor Cariño:
Necesito que me autorice a volver con mi señora. Me ha engañado cinco veces y ahora sí que me dijo que nunca más me pondrá el gorro.
La última vez fue hace seis meses, cuando la pillé dentro de mi auto en el patio de nuestra casa con el vecino. Sin ropa y feliz de la vida. Me quedé callado y ni siquiera le conté a la esposa del hombre que vive al lado de nosotros.
Después de eso, me fui triste a vivir a un departamento que me compré en Las Condes. Pero mientras más pasan los días, más extraño a esta mujer. Mi madre me dice que busque otra cosa, mis amigos me obligaron a nunca más llamarla, pero yo estoy destrozado y por eso le escribo. Ayúdeme, doctor.
Juan Pablo
JP:
En mis tantas décadas de Doctor Cariño siempre he promovido la defensa de los matrimonios. La mayoría de las veces existe una luz de esperanza, en el dar otra oportunidad. Más cuando hay hijos de por medio, quienes, a la postre, son los que más sufren con todos estos dilemas de adultos.
Pero en su caso, amigo mío, la luz de esperanza se agotó. Y hace rato. Que te engañen cinco veces y que cinco veces te digan "nunca más", no tiene disculpas. Y ojo que son cinco las que usted vio, vaya a saber usted cuántas otras que ni se enteró...
Es cosa de escuchar a sus cercanos y hacerles caso. Esto ya no dio y tiene que seguir adelante en su depto, llorando hasta que se le sequen las lágrimas y buscando apuntarle a una mujer que le sea fiel. Esa siempre ha sido la idea...
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