En el curso de mi hija llegó una colombiana infartante. Tiene una niñita que se incorporó al curso a fines del año pasado y ahora me la topé en las actividades de verano de la municipalidad.
Doctor Cariño:
En el curso de mi hija llegó una colombiana infartante. Tiene una niñita que se incorporó al curso a fines del año pasado y ahora me la topé en las actividades de verano de la municipalidad. Ahí me reconoció y me pidió mi celular para estar informada a futuro de las cosas del colegio. Un día con copete se me ocurrió enviarle un Guasap después de verle la foto de perfil. Lo que no pensé es que me iba a responder y preguntarme qué estaba haciendo. Cuando le respondí que estaba donde unos amigos tomando una cerveza, me puso "qué envidia''. Así que la invité y llegó. Mis amigos quedaron enfermos y yo quedé como un rey, porque ella estuvo al lado mío todo el rato como si fuera su pareja. Estoy soltero, soy papá responsable, y ella tiene sólo a la niñita. Me gusta y no sé si seguir dándole a esto.
Mariano
Mi señor:
¿Y cuál es el problema? Usted se porta bien como papito, se encuentra sin pareja y ella es una madre soltera con una niñita bella. Lo apaña, es simpática, se ve buena persona. Es decir, con todos estos antecedentes, le podría señalar que se sacó el Loto y el Kino juntos. Tiene que puro hacerla y disfrutar de ella, que más encima es colombiana. Le garantizo simpatía, cercanía, alegría, y en la cama lo va a pasar muy bien. Tanto hombres y mujeres del país del café son fogosos. Así que tiene que estar a la altura. Sin embargo, y lo más importante: esa mujer podría ser la mujer de su vida, así que cuídela, respétela como se merece. Y a la hija de esta quiérala para que también lo respeten aún más.
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