León con años de circo está convertido en un tierno gatito por el genio de su "domadora"

Doctor Cariño:

Como buen hijo de matarife, Diosito me dotó de un cuchillo respetable que he sabido afilar a lo largo de mi vida. Digamos, que a mis cuarenta y siempre probé de todo: desde el filete a la carne molida y, como mi mamita me enseñó a no ser regodeón, yo sólo abría la boca y me daban la papa. Pero a todos nos llega la hora. Y desde hace un tiempo que encontré a la mujer que me enseñó a amar y sufrir. Es que ella tiene un carácer como la "Trini" de Pacto de Sangre, y así como me ha hecho ser el gallo más feliz, de pronto le da la chiripiorca, me echa con viento fresco y me corta el agua. Hemos terminado varias veces. Yo me voy de la casa, pero después le compro una flores, que le fascinan, y volvemos a echarle para adelante. Pero me siento un monigote y no sé si tengo futuro con ella. Ayuda.

Rolanga

Mi tierno gatito:

Siempre he pensando que los que se hacen mucha publicidad, al final con cueva los han picado las pulgas. Pero bueno, supongamos que es cierto que usted es algo así como el "Brad Pitt" del matadero y que el Todopoderoso lo dotó con una sabrosa pulpa sin hueso que enloquece a las féminas sibaritas. Entonces me extraña que con tantos años de circo haya caído en esa verdadera planta carnívora, como me la describe, que le tragó hasta el orgullo. Yo creo que en las relaciones, sobre todo en las que hay amor, las parejas se aman y se odian, pero para ambos lados. Y si es usted el único que se va de la casa, y vuelve con el tallo de la rosa entre las piernas, es porque sólo uno está pagando los platos rotos. Si sigue así de tóxica la cosa, trate de cambiar de aires o acaso tiene un cuchillo de palo, que ya no corta ni pincha, ¿ah? Inténtelo.

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