Doctor Cariño:
Estuve bailando ayer con mi pareja un tema de Romeo Santos. Y más encima al artista lo vi en la Quinta Vergara el día anterior. Mi pololo de ocho años me había regalado la entrada. Y fui con una amiga. El problema es que en esa jornada conocimos a unos tipos que estaban en la galería. Entre tema y tema nos metieron cháchara, y después del festival nos fuimos a su departamento. Empezamos a jugar a tomar copete al seco y se me apagó la tele. Cuando desperté me vi sin ropa y con un gallo al lado. Me vestí, lloré y partí a Santiago. Y ahí me esperaba mi novio, todo un romántico. Por eso bailé con él ayer. Me siento sucia, doc, y no sé qué hacer guardando esta historia.
MALENA
Mi vida:
No sé cuántas veces voy a repetirle a las mujeres que no pueden, de ninguna manera, partir a un departamento de alguien que no conocen. Estamos hablando de gente que sólo han conversado un par de horas. O sea, perfectamente usted podría haber aparecido con el cogote cortado y contando su historia desde el cielo o infierno. Uno nunca sabe lo que va a pasar con alguien que no conoce. Claro, se le apagó la tele de tomar como enferma, pero nadie puede negar que quizás la drogaron para hacerla zumbar. Seguramente no fue así, pero terminó en pelotas, hija. Eso es gravísimo. Aléjese de su pololo mejor, y si él le pide una explicación, cuéntele la verdad. Seguramente no volverá más. Yo no volvería.