Doctor:
Me compré un gran danés y he causado sensación en el barrio. A tal punto que una vecina que ni me pescaba ahora me saluda y me pide el perro para salir a pasear.
Ahí quizás me la puedo jugar, porque ella ama los animales.
Es hermosa. Una morena de un metro setenta y dos, piernas contorneadas y una delantera como la de Alemania.
Y yo soy un chico con bonita cara, me parezco a mi mamita, pero mido 1,60. Tengo el puro perro grande y por eso me da julepe tirarme el salto.
Dígame cómo hacerla, doctor.
Chiquiturri
Enanín::
Mi viejo, típico del chico paroliento. Autos gigantes, camionetas cuatro por trocua, y él un perro más grande que un cabro de cuarto medio. Típico, cuando tiene todo pequeñito busca comprar cosas grandes. Pero por lo menos le sirvió para prender a la morenita.
Ahora, más allá de pasarle el animal, creo que debería bajarse por una buena conversa donde le deje claro el amor por los canes. Las mujeres aman a aquellos que respetan y adoran a los cachupines. Y ella lo podría agarrar por ese lado.
Sobre su porte, tranquilo, mire que el Miguelito de Morandé con Compañía se gasta la mansa woman y le pone empeño. Ojalá le salte la liebre y le toque escalar a esa guapa morena y escuchar el comienzo de una canción romántica antes de llegar al "tantán'' al tiro.
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