Doctor del amor:
El primer partido que vi del mundial fue el debut de Islandia. No me acuerdo del rival ni del resultado porque ni siquiera lo vi completo. Bastó que en la tele mostraran a una islandesa para que ardiera Troya en mi casa.
Es cierto que dije cosas lindas de esa mujer al lado de mi señora y que eso pudo ser desubicado, pero creo que la jefa le puso mucho color, se enojó tanto que me cortó el agua desde ese día. Se pasó poh, profe, y no se ve pa' cuando vaya a dar su brazo a torcer.
Para botar la energía acumulada estoy yendo a pichangear después de la pega, pero por mucho que se disfruten los goles, no es lo mismo que lo otro. Como venganza, el próximo fin de semana tiene el cumpleaños de su mejor amiga y me pidió que me quedara con los niños y le dije que no, que iría al estadio, a ver si así atina.
Pedro
Peyuco:
Si estaba viendo el partido con su mujer pudo haber gritado los goles o felicitar al arbitro por sus decisiones, pero no, el pastel tenía destacar lo linda que son las islandesas.
Ahora, lo más serio es que si su señora se enojó tanto por el piropo que le tiró a la tele, me tinca que debió ser la guinda de varios pastelazos anteriores.
Después, en vez de llegar temprano a la casa con chocolates o flores, el lindo se va jugar a la pelota. Y ahora más encima quiere mandarse a cambiar al estadio y dejar pagando a su señora con el cumpleaños.
Yo creo que el mes que lleva de sequía está afectando sus decisiones. Llegue con un engañito a la casa, destaque las cosas lindas de su mujer y olvídese de la pelota por un rato, por ahí podría arreglarla. Suerte.
Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com